CINE
El ‘doblete’ de Carmelo Gómez
El actor leonés protagoniza la película ‘La playa de los ahogados’, que se estrena hoy, y, a partir del día 16, ‘El alcalde de Zalamea’ en el Teatro de la Comedia de Madrid
En abril de este año, el actor leonés Carmelo Gómez anunciaba que abandonaba el mundo del cine («lo dejo porque me dejan», afirmaba), pero que tenía pendiente dos proyectos cinematográficos por estrenar, ambos de la mano de Gerardo Herrero: La playa de los ahogados y La punta del iceberg, y el primero de esos títulos se estrena hoy en los cines españoles. Gómez —premio Nacional de Cine en 1995 y dos veces ganador de un Goya—, había proclamado entonces que, tras ellos, se dedicaría íntegramente al teatro, a esas tablas que tanto ha pisado y que también lo reciben a partir del día 16: será en el Teatro de la Comedia de Madrid con El alcalde de Zalamea.
La playa de los ahogados es una adaptación de la novela homónima de Domingo Villar en la que se pone de manifiesto la superstición y el misterio que rodea al mar gallego. Un thriller, ambientado en la ciudad de Vigo, que sigue la investigación desarrollada por el inspector Leo Caldas (Carmelo Gómez), para descubrir quién es el responsable de la muerte de un marinero cuyo cadáver maniatado es arrastrado por la marea hasta una playa cercana.
En cuanto a la obra teatral, supone el regreso de la Compañía Nacional de Teatro Clásico a su casa, el Teatro de la Comedia de Madrid, después de trece años. Este ‘alcalde de Zalamea’ incluye un elenco amplísimo que encabeza Carmelo Gómez y un texto que enfatiza «el honor como dignidad personal, como derecho humano fundamental». Son palabras de la directora de la compañía, Helena Pimenta, quien recalcaba que el remozado teatro les volverá a acoger con esta obra de Calderón que se mantendrá en el escenario hasta el 20 diciembre para viajar luego por diferentes ciudades españolas y europeas.
El alcalde Gómez
Para la reapertura del Teatro de la Comedia, la CNTC ha escogido El alcalde de Zalamea, una obra que «sería necesaria cada año porque tiene mucho que contar», que trata sobre el amor, el honor y la justicia y que, pasada por el tamiz de la compañía, se hace más «conceptual» y enfatiza «el honor como dignidad personal, como derecho humano fundamental, una lucha de todos los tiempos».
«Ahora vivimos de forma más acomodada, pero sigue habiendo abuso del más fuerte por el más débil», continuó Pimenta, «nerviosa» por volver a la Comedia tras trece años en el Pavón. La dignidad violada de Isabel (Nuria Gallardo), el sentido de la justicia de Pedro Crespo (Carmelo Gómez) y la villanía del capitán Don Álvaro de Ataide (Jesús Noguero) son los ejes de una trama «de enorme complejidad» en la que «Calderón pone a una familia rural como modelo de virtudes frente a un mundo militar en el que el honor es ya algo viejo».
De esta manera, el leonés Carmelo Gómez vuelve a los clásicos encarnando a Pedro Crespo, el alcalde, con «muchísimas ganas de llegar al fondo de un verso insondable, un texto fantástico en un verso fluido pero nada líquido, porque son aguas profundas que dan muchas alternativas de mirada a la vida actual», resaltaba ayer el actor nacido en la villa de Sahagún.
Gómez recalcaba la vigencia de una obra con cuatro siglos de vida, porque Pedro Calderón de la Barca escribió sobre una época de cambios como la del fin de la aristocracia y el nacimiento de la burguesía, una transición extrapolable a la actual, en la que «Europa y España tienen que buscar soluciones nuevas, con hombres que sepan defenderse a sí mismos y a la colectividad», afirmó.