CULTURA
Premio a Fidalgo por narrar el ‘otro lado’ del olimpismo
El periodista del Diario de León acaba de ganar el Tiflos de Relato con el volumen titulado ‘Septiembre negro’
e. gancedo | león
Un boxeador gitano enfrentado al mito de la raza aria. Gimnastas judías a punto de morir gaseadas en Sobibor. Un fondista palestino encerrado en la franja de Gaza. Y once atletas israelíes secuestrados en un apartamento de la Villa Olímpica de Múnich por terroristas árabes mientras en una cocina de Tel Aviv se empieza a fraguar la venganza. «De todo eso va Septiembre negro», apunta Carlos Fidalgo, el escritor y periodista de la edición Bierzo de Diario de León a quien ayer confirmaban que era el ganador del Premio Tiflos, en su categoría de relato, que otorga la Fundación Once.
El otro lado del olimpismo, esto es, su parte más oscura, más heterodoxa o más inexplicable es en la que se ha zambullido Fidalgo para alumbrar una treintena de cuentos que le ha valido un prestigioso galardón —la variante de relato llega este año a su XXVI edición—, dotado con 10.000 euros y cuyo jurado, en el que figuran nombres de la talla de José Manuel Caballero Bonald, estuvo presidido por el crítico Santos Sanz Villanueva.
La obra será publicada este mismo año por Edhasa/Castalia y el autor no ocultaba ayer su satisfacción por un reconocimiento que se suma a otros como el premio Tristana de Novela Fantástica que logró en 2010 con El agujero de Helmand: «Estoy muy contento por el galardón, pero también porque el libro se vaya a editar en año olímpico. Es un viento a favor de los relatos, aparte del pedigrí que tienen los premios Tiflos y la propia editorial que los publica».
«La masacre de Múnich es el hilo conductor de Septiembre negro como presagio de los tiempos que vivimos hoy, pero el libro habla de más cosas —continuó el narrador bembibrés—, desde el nazismo, la discriminación de los negros, los judíos o los nativos americanos (como el caso de Jim Thorpe), el estallido de la Guerra Civil española, el Telón de Acero, el dopaje, la derrota y el triunfo, que a veces se presenta de las formas más insospechadas, no siempre en forma de medalla...».
La Fundación Once entregará el premio en un acto que tendrá lugar en mayo en el palacio que le sirve de sede en Madrid.
Fidalgo, cuya última novela es La sombra blanca (editorial Reino de Cordelia), estremecedor e inspirado texto que aúna lo bélico, lo fantástico y lo poético con el telón de la I Guerra Mundial, explica que los relatos que conforman Septiembre negro nacen de sucesos y personajes reales: «Desde Jesse Owens a Florence Griffith Joyner, de Bob Beamon a los atletas del Black Power, de Mark Spittz y su salida precipitada de los Juegos de Múnich a los duelos Liddell y Abrahams, de Coe y Ovett y el círculo perfecto de Mariano Haro, el ‘antílope’ de Becerril de Campos, entrelazados para tejer un mosaico sobre las zonas de sombra del olimpismo». El uso político del deporte, los albores del terrorismo... «Los Juegos nunca fueron lo que nos hicieron creer. Y un pebetero con una espiral de humo azulado se parece demasiado a una pira funeraria», sugiere.