Adiós a Tena, el músico que reapareció en León

verónica viñas / agencias | león

Manolo Tena creía en las Casualidades. Había titulado así su último disco, que incluía temas como Princesa azul y Confesiones de un payaso, cuyos videoclips grabó hace unos meses en La Bañeza y León. La capital leonesa esperaba escucharle en directo el 28 de mayo en Espacio Vías, en una gira para la que eligió estar arropado en el escenario por seis músicos leoneses: Yaser González, Pepe López, Julio Aller y los hermanos Jorge, Diana y Ricardo Majo. La empresa organizadora ha comunicado que devolverá el importe de las entradas en el mismo punto de venta donde se hayan adquirido.

Casualidades era el álbum número catorce del veterano músico, considerado el Joe Cocker español, al que un cáncer de hígado emboscó a los 64 años. Dueño de una voz arenosa e inconfundible supo reinventarse a lo largo de su carrera, que comenzó en los grupos Cucharada y Alarma, con el que actuó en varias ocasiones —y también en solitario— en el suroeste provincial: «Cuando no había trabajo, en los setenta y en los ochenta, La Bañeza nos dio de comer», recordaba el artista cuando regresó a esta localidad para rodar el videoclip de Princesa azul.

No quiso médicos ni hospitales cuando hace unos meses le diagnosticaron un cáncer con metástasis. Pero no tiró la toalla. En su último concierto, en Santa Cruz de Tenerife, «tuvo que cantar sentado porque ya le faltaban las fuerzas», relató ayer su hermano Rafa.

El autor de Sangre española era un auténtico superviviente. El ‘último’ de la Movida. Antonio Vega, Antonio Flores, Enrique Urquijo, Juan de la Rosa... «Son compañeros de un viaje que sólo ellos y yo entendemos», reconocía. Al final, Casualidades se ha convertido en su testamento musical, aunque no pretendiera serlo, como demuestra que uno de sus temas se llamara La vida por delante, escrito desde un centro de rehabilitación en Cuba.

«La repercusión en los medios de la muerte de Manolo Tena debe estar generándole más derechos de autor que en los últimos años. País», escribía ayer en su perfil de Twitter el músico Pancho Varona. Y es que Tena, pese a ser un incombustible de la música española y de haber compuesto temas para artistas como Luz Casal, Miguel Ríos, Rosario Flores o Ana Belén, solo deja deudas.

Su hermano Rafa no ocultó ayer su enfado con el que era el productor del artista cuando sacó en 1992 Sangre española, un disco del que se vendieron, dice, «cientos de miles de ejemplares» y del que él «jamás vio ni un solo duro». «Mi hermano firmó la cesión de sus derechos a ese señor en pleno síndrome de abstinencia de la heroína. Estoy decidido a entablar una batalla legal contra él porque se aprovechó de su debilidad y ha dejado a su niña, Manuela, de 10 años, de la que soy albacea, en la ruina», relata.

Su participación en el programa de la Sexta A mi manera y su nueva gira habían hecho soñar nuevamente a Tena...