Eva Juárez: de San Claudio a Las Vegas tras un Grammy
La soprano leonesa, candidata a los famosos premios en la categoría de música clásica «Optar ya es un galardón», dice.
La soprano leonesa Eva Juárez. ARCHIVO
p. rodríguez | madrid
No sólo de los Shakira, Ricky Martin y compañía viven los premios Grammy Latinos. Hay otros ilustres y categorías como la de Música Clásica que es por donde se cuela como nominada la soprano Eva Juárez, leonesa del barrio de San Claudio, que tenía una joya en forma de disco, grabado en Suiza con A Corte Musical, un grupo suizo, con director brasileño y especializado en música antigua española. En esa creativa Torre de Babel, la voz de la leonesa quedaba como un guante: «Es un grupo muy bueno con el que colaboro a veces. Me llamaron para que fuera la voz en un repertorio que me interesaba mucho como es el de Sebastián Durón (1660-1716). Además, transcribí algunas de las obras», explica la leonesa. Y habla de Lágrimas, amor ..., título del disco.
Los Grammy Latinos se entregan este año el 17 de noviembre en Las Vegas, y Juárez aún no sabe si asistirá a la entrega, en una velada en la que competirá con genios de la música clásica como es Jordi Savall. «Estar nominado junto a alguien tan importante es un honor. Nuestro disco ha sido un trabajo muy mimado del que me siento muy orgullosa. Lo grabamos en 2014 y el lanzamiento se hizo coincidir con este 2016 para que se conmemorara el año de la muerte de Durón. Por eso, que ahora llegue esto de los Grammy lo recibimos como un gran reconocimiento, casi un premio en sí mismo».
Eva Juárez estudió Música en Oviedo, pero asegura que se recuerda cantando desde que era muy pequeña. «Cantaba en el coro de San Claudio. Y ya cantaba polifonía con 6 años», afirma. Y ahora, aunque vive en León, ha residido en Suiza y en las Islas Canarias.
En 2007 alcanzó el primer premio en el Concurso de Canto de Verona. Ha actuado como solista y participado en óperas destacadas, y celebrado conciertos en los escenarios más importantes del mundo. España, Francia, Italia, Eslovaquia, Alemania y Japón son algunos de los países en los que su presencia ha sido más constante.
Pero (como ella misma dice: «Los clásicos no sólo escuchamos música clásica»), si se le lanza una pregunta casi prohibida, sorprende. ¿The Beatles o The Rolling Stones? Se quedaría con ambos, pero por salirse de la norma lanza un órdago: «Me quedo con Metallica».