León ‘exporta’ momias
El Museo Bíblico y Oriental ha cedido cinco de las más singulares piezas presentes en la gran exposición que estos días acoge el centro Cap Sciences de la ciudad francesa de Burdeos y titulada ‘Las momias nunca mienten’: varios felinos, un halcón y un pez momificados, ejemplo de una proyección internacional en ascenso..
e. gancedo | león
De ser una ciudad receptora de exposiciones itinerantes y obras diversas exhibidas de forma puntual a enviar directamente piezas a montajes foráneos de no poca relevancia. Ese puede ser uno de los destinos de futuro para León, el de ‘exportar’ arte e historia —con vuelta, claro—, no en vano esta tierra acumula ya museos y centros de interpretación de relieve suficiente como para poder despachar ese tipo de encargos.
Es el caso de los cinco objetos que desde principios del verano abandonaron el Museo Bíblico y Oriental rumbo a una de las exposiciones más populares de la temporada en el Sur de Francia, la titulada Les momies ne mentent jamais (‘Las momias nunca mienten’) que hasta marzo de 2017 puede verse en el centro Cap Sciences de Burdeos. Unas piezas que se cuentan entre las más originales y sugestivas de la muestra ya que revelan cómo los procesos de momificación eran bastante más variados y amplios de lo que la gente suele creer: en este caso se trata de animales que fueron momificados para acompañar a sus dueños en el viaje al más allá. En concreto, se trata de una momia de gato (época ptolemaica, 332-30 a.C); otra de halcón (715-400 a.C.); una cabeza de felino (672-332 a.C); una momia de pez oxirrinco (época ptolemaica, 332-30 a.C) y unas cajas con instrumental médico en bronce para la momificación (de época grecorromana).
«Se trata de una exposición pensada para acercar al público general el fascinante mundo de las momias —explicaron desde el museo e instituto leonés especializado en la historia y cultura del Próximo Oriente y de la Antigüedad—, de los procesos de momificación, las técnicas de embalsamamiento y de conservación de órganos, la investigación asociada a las momias y los aspectos antropológicos vinculados a la muerte en diferentes culturas». Su responsable de comunicación, Carlos Álvarez, hizo hincapié en que las piezas habitualmente mostradas en el museo con sede en el complejo de la Real Colegiata de San Isidoro fueron exhaustivamente estudiadas en su día por la egiptóloga Mari Luz Mangado Alonso, que ha trabajado en múltiples ocasiones junto al IBO leonés.
Y no terminan ahí las relaciones de cooperación de este centro con el país vecino, ya que recientemente miembros del instituto han colaborado en la elaboración del catálogo de À L’école des scribes. Lés écritures de l’Égypte ancienne , exhibición que acoge Montpellier hasta el 7 de enero, leyendo y comentando piezas como el cono fundacional del príncipe En-metena de Lagas (2404-2375 a.C.) que conmemora trabajos de restauración en un templo de la diosa Inana en la ciudad de Bad-tibira y el tratado de amistad del príncipe de Lagas con el rey Lugal-kigine de Uruk; el ladrillo fundacional del príncipe Gudea de Lagas (2141-2122 a.C.) recordando obras de mejora en el templo del dios Nigirsu de Lagas; y un texto administrativo de la Tercera Dinastía de Ur, del reinado de Amar-Sin (2046-2038 a.C.) con el movimiento de ganado de un año: 610 bueyes, 196 asnos, 2.627 ovejas y 2436 cabras.