ENTREVISTA
«Esta obra requiere un espectador activo»
JOSÉ LUIS GARCÍA-PÉREZ
Auténtico todoterreno de la escena española, rostro habitual sobre las tablas y tras las cámaras de cine y de televisión —incluso ejerce labores de productor—, la flexibilidad, la naturalidad y la versatilidad de José Luis García-Pérez son ya proverbiales. Pero es en El cartógrafo donde lleva al extremo todas esas cualidades puesto que aquí interpreta nada menos... que a nueve personajes.
—¿Qué mapa ha dibujado Juan Mayorga y qué papel tienen ustedes dos en él?
—Mayorga ha creado un gran mapa de la memoria y nosotros, evidentemente, somos la leyenda que ayuda a descifrarlo. Somos el vehículo en el que viaja el sentido de la obra, el mensaje que su autor quiere transmitir.
—‘El cartógrafo’ habla de ausencias y presencias en la Varsovia de los guetos nazis pero puede aplicarse a todo género de desmemoria, ¿no?
—Así es. Juan Mayorga suele definir la actualidad como «la dictadura del presente», cuando no paramos de oír que mirar hacia adelante es la única solución efectiva para cualquier tipo de problema. Pero intentar dar la espalda al pasado (en todos los aspectos, como personas y también como sociedad) es la mejor manera de no estar en condiciones de construir un futuro llamémosle feliz.
—¿Cómo se ha preparado para dar vida, en este espectáculo, a nueve personajes?
—Sí, son nueve y además muy diferentes, de distintas edades. Lo difícil ha sido construirlos sin caer en el exhibicionismo, saltando de una emoción a otra eliminando todo exceso, y ha requerido de un trabajo muy sutil y por cierto requiriendo siempre la complicidad del espectador: El cartógrafo necesita un espectador activo, que termine de completar el trabajo de los actores.
—¿Cómo es trabajar con Blanca Portillo?
—Maravilloso. Para mí resulta un regalo cotidiano. Es la mejor, pero además tengo la suerte de que es mi amiga. Con ella aprendo cada día.
—Como actor, ¿cuál es su particular reto diario?
—Me gusta ser flexible y descubrir, en cada proyecto, cosas nuevas en mí. Romper mi zona de confort, adentrarme en lugares nuevos. ¡Y además es que disfruto muchísimo con ello!