CULTURA ■ ARTE
El ‘Batman’ de Amancio sobrevuela el Cáucaso
El escultor leonés instala un ‘Hombre murciélago’ de seis metros en Georgia. También ha recibido el encargo de otra obra pública para una isla de Turquía.
El ‘Hombre murciélago’ que Amancio González acaba de instalar a orillas de un lago en la ciudad de Rustavi (Georgia). DL
e. gancedo | león
Un hombre murciélago acaba de posarse en mitad del Cáucaso, en la ciudad georgiana de Rustavi. Su autor es el leonés Amancio González, un escultor cuya proyección internacional no cesa de aumentar y cuyas criaturas pueblan no sólo ambas orillas del Atlántico sino que también empiezan a reproducirse entre los mares Negro y Caspio. Su nuevo y singular Batman fue diseñado, construido e instalado, a lo largo de este mes de julio, durante la celebración de un Simposio Internacional de Escultura en el que participaron varios artistas de ese levítico país ubicado a medio camino de Rusia, Armenia y Turquía, y de otras nacionalidades.
La escultura se titula Hombre murciélago II, está elaborada en hierro y tiene unas medidas de seis metros de altura y tres de envergadura. «Es la segunda pieza que realizo con este personaje —explicó el escultor—. La primera fue colocada en la ciudad mexicana de Zinacantepec en el año 2015 y forma parte de una serie escultórica con la que intento fusionar el mundo de la mitología con el cómic contemporáneo».
Y así, el objetivo de esta mezcla de Ícaro y superhéroe de viñeta, con el sello inconfundible del escultor nacido en Villahibiera —metal, enrejados, juego de huecos y formas que van modelando el personaje—, es el de llamar la atención, ante todo, de los más pequeños. «La obra fue colocada en un parque de la ciudad, frente a un gran lago, y tiene por objetivo captar la atención de los niños; en realidad es a ellos a los que va dirigido su mensaje con la intención de estimular, desde el arte, su imaginación», detalla.
Además de Amancio González, el simposio internacional reunió a los artistas georgianos Manuchar Okroscvaridze, Irakli Gochitashvili, Korneli Ramishvili, Ivane Guldedava, Levan Kipshidze, Beqa Dvali, Jumber Jikia, Vladimer Imerlishvili, el egipcio Salah Hammad y el francés Nicolae Fleissig.
Pero el leonés no se detiene y en estos momentos está inmerso en otro proyecto de grandes dimensiones. Se titula The Jump, estará realizada en mármol y refleja un audaz nadador que se lanzará al Mediterráneo una y otra vez en la isla de Mármara, frente a Estambul, Turquía, país que ya ha expuesto otras obras suy como El músico de Esmirna.