El leonés Juan Carlos Vázquez gana el Felipe Trigo de novela

verónica viñas | león

Ha tenido que surcar una auténtica aventura para ganar el premio de novela Felipe Trigo. Los nombres de los barcos, ópera prima del periodista leonés Juan Carlos Vázquez, se alzaba el viernes por la noche con el galardón que otorga el Ayuntamiento de Villanueva de la Serena, dotado con 20.000 euros, en una ceremonia presentada por el actor José Corbacho en el Palacio de Congresos de la localidad pacense.

«Se trata de una novela de aventuras y policiaca enmarcada en un ambiente de barcos y puertos», explica el autor, quien desarrolló toda su carrera profesional en Diario de León y desde hace una década trabaja en la dirección de comunicaciones de El Corte Inglés. Una novela negra o, mejor aún, «azul marino oscuro», en la que Vázquez zambulle al lector en ese mar que a él siempre le ha «hipnotizado». «Quería que oliese a sal», dice.

El libro, que será publicado por el grupo Planeta, se impuso frennte a otras 326 obras que concurrían en esta 37 edición. Vázquez, que se presentó al certamen bajo el seudónimo de Félix Barbacana, ha cocinado su estreno en la literatura a fuego lento. Los nombres de los barcos comenzó a escribirlo durante su época de redactor en este periódico, «dedicándole noches en vela y vacaciones». Hizo un primer intento con el libro al presentarlo el año pasado al premio Nostromo, donde quedó finalista. «Pero me di cuenta de que tenía fallos, problemas narrativos. Así que le di una vuelta, aunque la estructura, básicamente, es la misma».

Para Vázquez, que confiesa sentirse en «una nube», el gran premio es publicar en una editorial del peso de Planeta. «Me da vértigo», asegura este periodista que tiene licencia de patrón de barco.

Define Los nombres de los barcos como «una road-movie por mar». La novela arranca en la madrileña plaza de Neptuno —único punto en el que la trama toca tierra— y luego recorrerá el Mediterráneo, desde Barcelona, en una ruta hasta Malta y Sicilia, a través de Mallorca y Cerdeña. La novela también surca las aguas de Gijón, una ciudad muy querida para Vázquez, aunque en las páginas del libro no se cita explícitamente. El robo de unas marinas en el Museo Thyssen es el desencadenante de este periplo, en el que los ladrones, camuflados como hinchas del Madrid, sedujeron al jurado del premio Felipe Trigo. Un novela en la que «las peripecias, la aventura y el mar de fondo se convierten en el tapiz sobre el que se van tejiendo historias entrelazadas de personajes al límite» con un lenguaje «ágil, con guiños cinematográficos y una prosa sencilla y cercana», según describió la obra ganadora la presidenta del jurado, la directora del Centro Universitario Santa Ana de Almendralejo, Carmen Fernández.

Vázquez está inmerso ahora en la escritura de una nueva novela cuyo argumento no quiere desvelar, aunque sí adelanta que se trata de «una historia muy leonesa».

Por segundo año consecutivo, el jurado decidía dejar desierto el premio en la modalidad de narración corta, dotado con 6.500 euros, por entender que ninguno de los trabajos reunía todos los requisitos.