Cultura ■ Literatura
Poemas que nunca leíste
La editorial leonesa Eolas inicia la colección ‘Anfitriones’ con dos antologías: ‘Y el lugar era agua’, de Lorine Niedecker, y ‘La sien en el puño’, de José Manuel Arango.
El editor Héctor Escobar con Tomás Sánchez Santiago y José María Castrillón en la biblioteca Iván de Vargas.
Esta colección de Eolas bendice la poesía si lo bendito es lo contrario de maldito, porque el malditismo está sobrevalorado. Anfitriones nace así desde tierra leonesa de la mano del editor Héctor Escobar, que propone literatura de alto voltaje poético que por razones, lejanía, olvido o dificultad no ha estado al alcance del lector. Y ayer se presentó en Madrid, en la biblioteca Iván de Vargas, con la intervención de Tomás Sánchez Santiago, José María Castrillón y el propio Escobar.
En palabras de Sánchez Santiago, «Anfitriones quiere ser una muestra de autores hispanoamericanos pero también de otros de otras lenguas», afirmó acerca de este escaparate que se abre en forma de libro para seguir reivindicando la potencia de la poesía. De hecho, se abre con dos propuestas: por un lado, La sien en el puño. Antología poética de José Manuel Arango, con selección y prólogo de José María Castrillón. Y al mismo nivel, compartiendo estreno: Y el lugar era agua. Antología poética de Lorine Niedecker, con traducción y edición de Natalia Carbajosa.
El editor leonés explicó que «el proyecto nace con la idea de ofrecer al lector poesía de muy alto nivel y que resulta desconocida. Pero seleccionada por expertos que servirán para que esté al alcance tanto de los que pueden tener nociones sobre los autores como para los que quieran acercarse por curiosidad y afición a la poesía».
Escobar remarcó ayer «la satisfacción por la repercusión social en el mundo específico literario que ya está teniendo Anfitriones y también de los que han visto ya que se trata de una edición, como todas las que vamos a hacer, tan cuidadas y de tanta calidad», dijo.
Esta recuperación de poetas del siglo XX, se inicia así con con dos autores «que son los primeros porque los eligieron los encargados de la edición», señalaba Tomás Sánchez Santiago, también alma mater e impulsor de la colección.
«Resulta curioso, porque al final, dos autores tan diversos conectan. Sobre todo en que son escritores que remiten a la influencia de una poética exigente. Sin concesiones a la verbosidad», relató Sánchez Santiago. El objetivo final será llegar a los lectores de todo tipo. «Poner en emergencia a poetas que por un lado puede tratarse de un descubrimiento y, por otro, lograr su redifusión», añadió Sánchez Santiago.