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Los actores más viejos de Europa
Los hermanos de Arintero son los protagonistas de un documental que competirá en el Festival de Cine Arqueológico de Zamora y que no ha obtenido ayuda alguna a pesar de divulgar el mayor hallazgo científico acontecido en León.
«Los arqueólogos, los expertos, se inclinan por la opción de que los esqueletos fueron colocados de esa manera a propósito, que formaban parte de un ritual funerario. Los espeleólogos que los encontraron, por el contrario, creen casi imposible acceder a pie a los tan escabrosos lugares de la cueva donde se hallaron... a no ser que antes existiera una entrada que ahora ha desaparecido, claro...». Lo dice Puri Lozano, directora, junto a Miguel Sánchez, del documental ‘Dos hermanos del Mesolítico’, en referencia a los muchos misterios que aún rodean al que ha sido calificado como el mayor descubrimiento científico acontecido hasta la fecha en León.
El documental, de 50 minutos de duración, incluye entrevistas a la mayoría de personas que, de un modo u otro, han intervenido en la localización y estudio de los restos de dos hermanos de hace más de 7.000 años recuperados en una cueva situada entre Arintero y La Braña. Lo terminaron en otoño, lo estrenaron en el Museo de León y ahora ha sido seleccionado para el III Festival Internacional de Cine Arqueológico de Castilla y León, que se celebrará en Zamora del 6 al 8 de abril. ‘Dos hermanos del Mesolítico’, producido bajo el veterano sello del que son responsables Lozano y Sánchez, El Búho Viajero, competirá por el Viriato de Oro dentro de la sección de documentales y también aspira al Premio Especial del Público.
La idea procedió del propio grupo de espeleólogos que en octubre de 2006 se toparon con los esqueletos, a los que bautizaron como Ataúlfo (de ‘ataúd’) y Wenceslao (de ‘vencido’) en una cueva que llamaron «de los dos hermanos» de manera providencial, pues más tarde la ciencia demostró que efectivamente lo eran. «Aunque sólo contaban con una minúscula ayuda del ayuntamiento de Cármenes, a través del ILC, nos embarcamos en la aventura pese a las muchas dificultades que encontramos», recuerda Lozano, quien quiere agradecer, por un lado, la «tremenda generosidad» que demostraron todos los entrevistados pero, por otro, su sorpresa ante el silencio total de las instituciones ante sus peticiones de ayuda, «a pesar de haber sido el descubrimiento que ha puesto a León en el mapa de la ciencia internacional, como expresa una de las especialistas en la película», objeta.
Y es que en el documental participan los autores de los análisis y estudios a los que se sometió a los restos, como Julio Vidal, Encina Prada y Carles Lalueza-Fox, «quienes explican, en lenguaje sencillo y divulgativo, los trabajos que han conducido al descubrimiento del primer genoma preneolítico europeo, así como las repercusiones de esos estudios en el campo de la genética, la ciencia y la salud humanas», indican Sánchez y Lozano. Detalles como que tenía la piel oscura y los ojos azules, que padecía intolerancia a la lactosa y que era un experto cazador y recolector son algunas conclusiones de unos estudios reflejados en las revistas científicas más prestigiosas del mundo. Ahora, Sánchez y Lozano quieren ampliar el documental para poder hacer aún más internacionales a estos hermanos montañeses.
Julio Vidal, arqueólogo de la Junta, frente a uno de los esqueletos encontrados en la cueva. EL BÚHO VIAJERO