«Lo más bonito es ser diferente»

«Mi trabajo es entrenar a jugadores normales. Y vosotros, ni sois jugadores ni sois normales». Lo dice un desesperado Marcos, segundo entrenador de un equipo profesional de baloncesto que, por avatares de la vida, se ve obligado a desvelar los secretos de este deporte a una pandilla formada por personas con distintos tipos de discapacidad en la nueva película de Javier Fesser, Campeones, que se estrena el 6 de abril. El personaje de Marcos está encarnado por el mediático Javier Gutiérrez y entre los integrantes de ese más que singular equipo está Marín, a quien pone rostro, expresión y tremenda afectividad el actor leonés Jesús Vidal.

Reciente ganador de un Goya por El autor, Gutiérrez, muy conocido gracias a sus trabajos tanto para el cine (Torrente 3, El olivo, La isla mínima) como para televisión (Los Serrano, Águila Roja) interpreta a un entrenador insensible, bebedor y buscalíos que tiene problemas en el trabajo, con su pareja y, en general, con casi todo lo que le rodea.

«Un día, en pleno partido de Liga, esas frustraciones desembocan en una tremenda bronca con el primer entrenador que deriva en una borrachera y ésta en un accidente de tráfico que le sienta en el banquillo —indican desde las productoras del filme—. La sentencia le llevará a entrenar a un equipo de baloncesto muy especial a la vez que pierde su trabajo y se rompe su relación sentimental». Aunque en un principio se ve superado por el abismo que, según cree, se abre entre él y los integrantes de la catastrófica cuadrilla, «será quien realmente aprenda de esta aventura junto a un equipo donde imperan las ganas de vivir y donde se da importancia a las cosas que realmente la tiene», continúan. Porque, como le responde otro personaje, «y quién es normal, Marcos. ¿Tú y yo somos normales?».

Para el leonés Jesús Vidal, a quien conocíamos sobre todo por su presencia en montajes teatrales, su primera inclursión en el cine ha supuesto una «magnífica oportunidad» en su evolución y crecimiento como actor. «Para mí, que tengo una diferencia visual, ha sido un gran reto y también un auténtico regalo afrontar, desde mi ceguera y desde mis propios rasgos físicos, la interpretación de Marín, un personaje con diversidad intelectual dotado de gran ternura», explicó a Diario de León. Vidal, que también es director y dramaturgo, añade que Marín arrastra «muchos miedos», pero que, a la vez, «es muy afectuoso y cuenta con una manera tremendamente peculiar de ver la vida. Para él, el equipo es lo más importante, y eso queda muy patente en la película», relata. «Campeones ha representado para mí una gran oportunidad de crecimiento», dice quien cuenta con una más que amplia presencia en esta película ideada y realizada por Javier Fesser, uno de los directores españoles más originales de las últimas décadas (El milagro de P. Tinto, Camino, La gran aventura de Mortadelo y Filemón...). De hecho, en esta película aúna los dos extremos de su creatividad: la comedia y el drama. «Campeones aborda el mundo de las personas con discapacidad intelectual con la misma sinceridad y naturalidad con la que ellos afrontan sus vidas —explicó Fesser—. Su falta generalizada de prejuicios sobre cualquier asunto y su envidiable afición por decir las cosas tal y como las piensan permiten a sus protagonistas vivir una aventura irremediablemente divertida y humanamente deliciosa».

Campeones es, a juicio de su director y coguionista, «una mezcla explosiva de humor y ternura. Humor que proviene de sus personajes, de su inocente pero aplastante interpretación de la realidad, y ternura que emana de cada uno de sus gestos desde el primer fotograma en el que aparecen. Es imposible no enamorarse de la transparencia, la pureza, la generosidad y la extraordinaria capacidad de estas personas para emocionarnos».

Y así, la evolución lógica de la historia hace que los que parecen discapacitados al principio acaben siendo los más «capacitados» y viceversa. «De esta manera, es fácil suponer que la película nos llevará a la siguiente conclusión: ‘Quien se considere libre de toda discapacidad, que tire la primera piedra’», manifestó Javier Fesser.

En la línea de Intocable, El octavo día y Forrest Gump, esta nueva cinta, producida por Pendelton, Morena Films, Movistar Plus y TVE, quiere ser «un festín de formas diferentes de ver el mundo y de caras nuevas que se quedarán con nosotros por mucho tiempo», confía su creador. Y una de ellas es la de Jesús Vidal, quien califica de «tremendamente valiente» la película, y de auténtico «lujo» poder haber trabajado junto a Gutiérrez y a Fesser (un director que sabe «hacer crecer» al actor). «En el fondo, la idea que transmite la película es la de que lo más bonito que hay es la diferencia... y que la gente con discapacidad no son, en absoluto, enfermos».

Vidal, además, viene de trabajar en la obra teatral Cáscaras vacías, del Centro Dramático Nacional y Lazona, que se repuso en el María Guerrero de Madrid, y de ganar el Premio a la Acción por la Inclusión otorgado por Plena Inclusión Madrid.

Y suya es, por último, una de las frases más conmovedoras de la película, la que le dirige Marín a Marcos tras haber aprendido la lección: «A mí tampoco me gustaría tener un hijo como nosotros... lo que sí me gustaría es tener un padre como tú».