Sus fortalezas y sus debilidades

Si a los canales romanos de la Cabrera se les coloca al lado de algunas de las rutas más populares del país, como la del Cares, también en León (once kilómetros), o la malagueña del Caminito del Rey (ocho), «la comparación es imposible», avisa el ingeniero de minas Roberto Matías. «Lo que aquí tenemos es un conjunto de senderos largos; pensemos que si consiguiéramos unir los tramos ya acondicionados con los dos nuevos que ahora se van a habilitar, nos encontraríamos ante un Sendero de Gran Recorrido imponente, de 70 kilómetros», reflexionó. Pero, ¿qué está sucediendo con el que ya existe, con el que discurre entre las Médulas y Llamas? ¿Está sirviendo para atraer visitantes? «De momento no demasiado, y eso por dos razones principales —explicó Roberto Matías—: por un lado no se ha publicitado adecuadamente, no se está dando a conocer a la sociedad de forma efectiva, pero por otro porque no hay equipamientos turísticos en la zona, no tienes apenas sitios donde comer o dormir, ten en cuenta que son necesarias siete horas para cubrir ese trayecto». El ingeniero destacó, eso sí, la página oficial www.canalesromanos.es, «muy útil para conocer al detalle la historia, la geografía y el trazado de los canales».