‘Entre dos aguas’ de Isaki Lacuesta, Concha de Oro
Benjamín Naishtat, Concha de Plata al mejor director por ‘Rojo’.
A. GARCÍA | san Sebastián
El 66 Festival de Cine de San Sebastián concedió su máximo galardón, la Concha de Oro, a la película de Isaki Lacuesta ‘Entre dos aguas’, que combina realidad y ficción en un relato con los mismos protagonistas que su aclamada ‘La leyenda del tiempo’ (2006).
Es la segunda vez que Lacuesta se lleva el máximo galardón del certamen donostiarra. Lo hizo por primera vez en 2011 con ‘Los pasos dobles’.
El cineasta une así su nombre al de otros cinco directores que en la historia del certamen han conseguido dos veces la Concha: Francis Ford Coppola, el iraní Bahman Ghobadi, el mexicano Arturo Ripstein y los españoles Imanol Uribe y Manuel Gutiérrez Aragón.
El jurado, presidido por Alexander Payne, reconoció «una película que incita al espectador a experimentar de manera íntima y verosímil las vidas de sus protagonistas» y que compone un «compasivo retrato social».
Desde el escenario del Kursaal, Lacuesta ha invitado a que se uniera a él a todo el equipo de una película «hecha en familia», y ha cedido la palabra a sus protagonistas, los hermanos Israel y Francisco Gómez Romero, el segundo de ellos vía mensaje de audio, ya que no pudo acudir a San Sebastián por motivos laborales.
En el filme, el director catalán y su guionista Isa Campo se reencuentran doce años después de ‘La leyenda del tiempo’ con Isra y Cheíto, sus protagonistas, dos hermanos gitanos marcados por la muerte de su padre y las dificultades para abrirse camino en la vida en un entorno muy deprimido.
Ambos ejercen de actores y no de ellos mismos, aunque haya algunas coincidencias en aspectos de su vida.
El realizador argentino Benjamín Naishtat consiguió la Concha de Plata como mejor director por su labor en ‘Rojo’.
Protagonizada por Alfredo Castro y Darío Grandinetti, que obtuvo también la Concha de Plata como mejor actor del Zinemaldia, ‘Rojo’ está ambientada en los años 70 en las vísperas del golpe militar de Jorge Videla y es una de las primeras cintas argentinas que pone el acento en la complicidad civil durante la dictadura.
El director, que compartió su premio con todos sus compañeros de trabajo, desde el elenco a los productores y técnicos, señaló que, oyendo a sus compañeros ganadores, ha sentido «el gran peso de muchas causas políticas que confluyen esta noche».
El filme ha conseguido también el premio a la mejor dirección de Fotografía para Pedro Sotero.
La película ‘Alpha. The right to kill’, del director filipino Brillante Mendoza, obtuvo el Premio Especial del Jurado en el 66 Festival de Cine de San Sebastián.
Mendoza llevó a la pantalla una historia de corrupción policial con el trasfondo de la guerra antidrogas del presidente filipino Rodrigo Duterte, que ha dejado más de 7.000 muertos en dos años.
En este trabajo, basado en la serie ‘AMO’ que hizo para Netflix, el ganador del premio al mejor director de Cannes en 2009 por ‘Kinatay’, sumerge al espectador en los barrios más marginales de Manila, con su habitual estilo urgente y realista.