Al Musac le faltan luces

verónica viñas | león

El Musac, pese a su exterior de cristal, es uno de los museos más opacos del país. Así lo refleja el último informe de la Fundación Compromiso y Transparencia, titulado A través del espejo. El Atrium de Vitoria, que durante años tuvo como modelo el museo leonés, es ahora el museo más transparente de España. El estudio evalúa la información publicada en las web de 60 museos españoles de bellas artes y arte contemporáneo. Quince museos superan el ‘test’ de buen gobierno y transparencia, entre ellos el Patio Herreriano de Valladolid, el Thyssen, el Macba de Barcelona o el Guggenheim de Bilbao.

Otros trece están en la categoría de ‘translúcidos’ —cumplen al menos ocho de los veinticinco indicadores de transparencia—, como el Museo Nacional de Escultura de Valladolid o el Esteban Vicente de Segovia. Finalmente, hay 32 opacos; aquellos que cumplen menos de ocho indicadores. En este ránking acompañan al Musac otros tres museos de la comunidad autónoma: la Fundación Díaz Caneja de Palencia, el Da2 de Salamanca y el Museo de Burgos.

La ‘prueba del algodón’ puntúa cuestiones como si se hace pública la gestión de fondos, si se identifica a las personas que forman parte del órgano de gobierno, las adquisiciones, cesiones y préstamos de obras, el presupuesto para el año en curso y el presupuesto anual de ingresos, la cuenta de pérdidas y ganancias, el cumplimiento de los objetivos y el número de visitas anuales, entre otros.

Manuel Olveira, director del Musac, encaja el ‘golpe’ que supone el informe de Compromiso y Transparencia, una fundación independiente creada en 2007 por un grupo de profesionales procedentes del mundo de la empresa, la academia y el sector no lucrativo para impulsar el buen gobierno, la transparencia, la rendición de cuentas y el impacto social de las instituciones.

Sin embargo, Olveira puntualiza que hay información que sí esta en la web, aunque «igual no a dos clics» y que el informe «no ha valorado». Reconoce que estos estudios «nos ayudan a mejorar y a darnos cuenta de lo que hacemos». Pero aclara que «no se trata sólo de lo que el museo quiera, sino que la administración lo permita».

A través del espejo sentencia que «los museos públicos que disponen de mayores grados de autonomía en su gestión suelen ser los más transparentes. Los museos públicos con peores puntuaciones (aquellos que no alcanzan los cinco puntos) suelen ser instituciones integradas en consejerías de diferentes comunidades autónomas o en ayuntamientos sin autonomía económica y de gestión».

Lo cierto es que cuando empezó el declive de visitantes en el Musac la Junta adoptó la política de dar cifras puntualmente, y no tras cada temporada de exposiciones, además de sumar los participantes en talleres y otras actividades paralelas.

La consejera de Cultura, Josefa García Cirac, afirmó hace unas semanas, durante la inauguración de la retrospectiva dedicada a la veterana artista leonesa Teresa Gancedo que el Musac ha recibido, desde su apertura en 2005, más de 1.300.000 visitantes, «el mejor aval del trabajo realizado», dijo.