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León honra al jefe del clan Quijano

El Auditorio se llenó para tributar un sentido homenaje a Manolo Quijano, el gran patriarca musical de la familia «Estoy muy agradecido por este enorme reconocimiento», dijo.

Manolo Quijano hizo una entrada triunfal en el abarrotado Auditorio de León. Todos los asistentes, entre ellos el alcalde, le tributaron un enorme aplauso. RAMIRO

Manolo Quijano hizo una entrada triunfal en el abarrotado Auditorio de León. Todos los asistentes, entre ellos el alcalde, le tributaron un enorme aplauso. RAMIRO

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G. FERNÁNDEZ | LEÓN
León

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El patriarca. El jefe del clan. El padre de los Quijano. Y leonés de Armunia como él mismo recuerda siempre. Todo eso salió a relucir ayer noche en el homenaje que León tributó -nobleza obliga- a Manolo Quijano, el ‘Papá Quijano’ como ya se le conoce cariñosamente en León. No fue ninguna sorpresa que el Auditorio estuviese a rebosar. Incluso se quedó pequeño para la gran cantidad de peticiones que llegaron al Ayuntamiento intentando no perderse un agasajo donde la emotividad fue el hilo conductor.

Emotividad desde el minuto uno cuando con el Auditorio lleno, Manolo Quijano hizo su entrada por el pasillo central. El aplauso fue atronador y no precisamente corto. En pie lo recibieron entre otros muchos el alcalde de León, Antonio Silván, el subdelegado del Gobierno, Faustino Sánchez y numerosos representantes políticos. Elegante con su traje gris y sombrero del mismo tono, Entró luciendo el escudo de León en la solapa. «Pero que conste que León está al lado de Armunia», apuntó con humor y sentido amor por la patria chica.

Y lo bueno es que es profeta en su tierra. Entre las numerosas distinciones y reconocimientos que recibió ayer durante la larga gala de homenaje la primera fue una placa que le entregó el pedáneo de Armunia donde estaba grabado el himno a esta localidad compuesto por él.

El jefe del clan recibe una placa con el himno de Armunia, donde nació. RAMIRO

Al sénior de la familia Quijano se le notaba emocionado. El momento era especial, detrás hay muchos años de trayectoria musical y de amor a su tierra. Desde que compró su primera guitarra por 250 pesetas hasta el momento actual el camino es largo. Y las notas y canciones más.

«Muchos de los que ahora en León tocan una guitarra, una bandurria o un laúd seguramente pasaron por las manos de nuestra padre», comentaron a la entrada del Auditorio los tres integrantes de Café Quijano, Manuel, Óscar y Raúl a los que también se unió su hermano Enrique. Todos en primera fila escoltando al patriarca. «Un homenaje merecido y que ha llegad en su momento, con él capaz de recibirlo con ilusión»

«La ciudad le debe mucho a Manolo y por ese motivo León se lo quiere devolver como se merece», apuntó el alcalde de León, Antonio Silván. «Ha llevado la bandera de León a todo el mundo y nos hace sentir orgullosos de León y de ser leoneses», añadió.

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