Libros
El leonés Calleja analiza ‘Lo bueno de España’
El periodista y escritor publica, desde una perspectiva de izquierda, una crónica histórica ante el ataque nacionalista
En Lo bueno de España, que llega mañana a las librerías, el periodista leonés José María Calleja se propone contar el lado bueno de este país. Una crónica que repasa los hechos históricos, las iniciativas y los personajes que nos permiten sentir un orgullo razonable. La falta de estima hacia España y su historia por parte de los propios españoles es legendaria.
Los ejemplos abundan: desde el «si os habla mal de España… es español» de Bartrina, al unamuniano dolor de España, el pesimismo noventayochista, el hecho de ser quizá el único país que ha asumido una leyenda negra tejida por otros o lo que recientemente se ha llamado fracasología, el regodearse en los propios fallos y pensar, como (brillantemente, por otra parte) expresara Gil de Biedma, que «de todas las historias de la Historia sin duda la más triste es la de España», «este país de todos los demonios».
Para algunos, ese pesimismo y esa falta de aprecio al propio país parecen acentuarse en una izquierda reacia a entonar el «soy español, español, español». Este libro, escrito desde una perspectiva de izquierda, viene a rebatir este último tópico y a quitar la razón a todos los militantes del pesimismo nacional. Lo bueno de España , título elocuente, huye de la autoflagelación sin caer en la hagiografía.
El objetivo
«He tratado de narrar los aspectos de los que los españoles podemos sentirnos orgullosos»
«He tratado —dice su autor— de narrar los aspectos de los que los españoles podemos sentirnos razonablemente orgullosos en nuestra historia más reciente… Estas líneas quieren ser un elogio de la democracia española… Hay una mirada progresista que reivindica el orgullo de nuestra historia, reciente y remota».
Sobre la exhumación de Franco del Valle de los Caídos, Calleja afirma que «la extracción era justa, un acto de justicia; justicia política e histórica, una reparación urgente por tardía para sus víctimas, con las que artificialmente y de manera inconcebible descansaba. No abría heridas, cerraba las de las víctimas y zanjaba un capítulo pendiente». «Un acto de justicia democrática que, aunque tardío, llena de emoción».
De Felipe VI opina que «frenó el golpe del independentismo catalán». Su discurso del 3 de octubre de 2017 «tuvo un alcance político innegable… acentuó el compromiso de la Corona con la Constitución y con la democracia».
A propósito de las autonomías, el periodista leonés asegura que «la España autonómica forma parte de la España constitucional, y eso deberían tenerlo en cuenta los que critican la primera a golpe de defender enfáticamente la segunda».
En cuanto a la violencia machista, matrimonios homosexuales e igualdad, Calleja es taxativo: «Pasamos a ser modelo en derechos civiles en todo el mundo».