Pablo López Presa | Diputado de cultura
«La cultura es clave en la reconstrucción económica y social de la provincia»
—¿Cómo afectará la cuarentena a los proyectos del ILC?
—Si algo ha demostrado esta cuarentena es que el ILC cuenta con una plantilla apasionada con su trabajo. Desde el primer día hemos intentado adaptarnos a la situación bajo la premisa de mantener al máximo los servicios en todos los departamentos y he de decir que la disposición de los trabajadores y trabajadoras ha sido excelente. En pocos días hemos reestructurado turnos, modificando espacios... En todos los departamentos se sigue trabajando tanto presencialmente como desde casa, para que este periodo no suponga un retraso de los asuntos, sino al contrario, ya que disponemos de más tiempo efectivo.
—¿Hay proyectos que se van a paralizar?
—En el ILC habíamos hecho los deberes antes de decretar el estado de alarma. Prueba de ello es que la mayoría de nuestras convocatorias de subvenciones están publicadas y por lo tanto en cuanto se levante el estado de alarma de forma automática los plazos podrán continuar. Me consta que muchos posibles beneficiarios están aprovechando para preparar memorias o proyectos que serán presentados tan pronto como se pueda. De momento, el único escenario que contemplo es el de ejecutar todo lo previsto.
—¿Teme que las partidas de Cultura acaben derivándose a temas más urgentes?
—Reivindico que la cultura debe ser un pilar básico para afrontar esta crisis. La cultura es y será una herramienta clave en la reconstrucción económica y social de esta provincia.
—La Cultura va a ser uno de los sectores más castigados por el coronavirus. ¿Tienen un plan de contingencia?
—Estamos trabajando a nivel de todas las áreas de la Diputación en un ambicioso plan de contención para responder a esta crisis. De su duración y afección a la economía de los pueblos en general y al sector cultural en particular, dependerán las medidas adoptar pero tengo que recordar que algunas de carácter más inmediato se están ya poniendo en marcha como por ejemplo la entrega de libros por correo ordinario a los usuarios de bibliobuses y que les harán pasar un poco mejor estos días de cuarentena a los habitantes de esta provincia.
—¿La redacción del Plan Director de Lancia sigue adelante? ¿Estará este año?
—El futuro de Lancia, y de la comarca, depende de los propietarios de las parcelas donde se asienta el yacimiento. La Diputación tiene un plan claro: adquirir los terrenos y posteriormente impulsaremos la redacción del proyecto global de Lancia y lo ejecutaremos. Los fondos para ello están consignados en el presupuesto de 2020 y listos para ponerlos en marcha. Ya hemos iniciado contactos y la predisposición, en general, es buena; pero debemos ser conscientes de que si los propietarios de la zona no colaboran, no podremos avanzar.
Creo que este equipo de gobierno en estos siete meses de gestión ha dado muestras más que suficientes de que Lancia es una prioridad; y lo hemos demostrado con avances muy significativos como el adecentamiento de la zona devastada por el incendio de 2018 o la puesta en marcha de un nuevo vallado y señalización, que será una realidad en los próximos meses, ya que la obra ha sido adjudicada.
—¿El ILC ha desistido de tener un director? ¿Funciona mejor así?
—El ILC necesita una profunda revisión de su estatuto 25 años después de su creación; y eso incluye replantear esa figura, pero también la del consejo asesor y otras. Estos meses nos han servido para conocer con gran detalle el funcionamiento de la institución, sus fortalezas y debilidades, y vamos a introducir cambios progresivos en el organigrama.
—¿Con las exposiciones del ILC, están reajustando fechas?
—Luis García, nuestro director de Arte, está trabajando en nuevos proyectos con el objetivo de estar totalmente preparados para cuando se supere esta crisis sanitaria. Pretendemos firmar acuerdos con numerosos ayuntamientos en los próximos meses, para disponer de centros estables con programación propia donde exponer tanto los fondos del ILC como sus nuevas propuestas expositivas.
El ILC necesita una profunda revisión y replantear la figura del director y del consejo asesor
—El CLA, pese a que el edificio es espléndido y tiene buenas exposiciones, sigue siendo muy desconocido. ¿Hay alguna idea para ‘reflotarlo’?
—El CLA necesita, como necesita el ILC, una estrategia de marca y una imagen corporativa reconocible. Siento que, en este sentido, está todo por hacer. Y hablando del CLA debo ser autocrítico: el Centro Leonés de Arte no se conoce. A pesar del momento que vivimos, se están haciendo pequeños avances. La semana pasada se han colocado banderas en los hasta ahora vacíos mástiles de la entrada, tenemos listas para colocar banderolas con el nombre y horario del centro... Confío en que los leoneses, a la vuelta de la cuarentena, empiecen a conocer este magnífico edificio.
Ningún área del ILC ha sufrido mayor aumento presupuestario, un 250%, hasta los 200.000 euros
—El Patrimonio Etnográfico es el gran olvidado, ni siquiera hay un inventario fiable de hórreos, palomares, molinos.... Aparte de subvenciones puntuales, para restaurar algunos de ellos, ¿hay algún otro proyecto?
—Ningún área del ILC ha sufrido una mayor aumento presupuestario este año que la partida de restauración de arquitectura tradicional, que ha sido incrementada en un 250% hasta alcanzar los 200.000 euros, lo cual debe entenderse como una declaración de intenciones. Durante años he redactado proyectos, memorias e intervenido como arquitecto en distintos proyectos para salvar este patrimonio del que soy un verdadero amante. A la espera de otras iniciativas, que iremos perfilando, quiero recordar que este año no solo ayuntamientos, sino también pedanías y particulares, pueden solicitar ya subvenciones para salvar este tipo de construcciones.
—Este año se conforma con sacar adelante...
—Este año me conformo con que nuestra sociedad supere la gravísima crisis sanitaria que tenemos entre manos. Para lograrlo, contamos con muchas herramientas y también con el poder de la cultura.