Patrimonio
La Diputación busca el foro romano de Lancia
Negocia comprar terrenos del yacimiento, destinará 100.000 euros a localizar vestigios y otros 150.000 al Plan Director
Lancia decepciona la primera vez que se visita. Apenas hay restos visibles en una parcela de 500 metros cuadrados, cuando la ciudad astur-romana ocupaba al menos 24 hectáreas. La Diputación tiene un plan para rescatar un yacimiento que no se ha tocado en 35 años. Los primeros trabajos han sido señalizar el acceso a este lugar histórico desde la A-60, colocar paneles informativos, cambiar la vieja valla y adecentar un espacio para aparcamiento. «El cerramiento se encontraba en un estado lamentable», afirmó ayer el presidente de la Diputación, Eduardo Morán, durante su visita a Lancia, acompañado por el diputado de Cultura, Pablo López Presa.
En estos primeros ‘retoques’ el Instituto Leonés de Cultura (ILC) ha invertido 50.000 euros. Morán adelantó que tiene prevista otra partida de 100.000 euros para buscar con georradar la ubicación exacta del foro romano —situado previsiblemente a escasos pasos de las termas y el mercado, cuyos vestigios son los únicos a la vista—, así como para llevar a cabo nuevas excavaciones.
En amarillo la parcela de la Diputación; y en rojo lo excavado. En verde las parcelas que quiere comprar la Diputación. ALBERTO CALVO
Además, ha comprometido 150.000 euros para la redacción de un proyecto global —un Plan Director— que concretará todas las actuaciones precisas para salvar un yacimiento único en España. Morán parece decidido a sacar del letargo este gigantesco enclave histórico, incluida Sublancia, los restos que aparecieron durante las obras de la autovía León-Valladolid y que, según el arqueólogo de la Diputación, Jesús Celis, sería en realidad el suburbium de la gran civitas de Lancia.
Ampliar territorio
«Necesitamos la propiedad de los terrenos y en eso estamos trabajando, la alcaldesa de Villasabariego está trabajando con el diputado de Cultura para poder adquirirlos a un precio razonable», explicó el presidente.
Esta operación implica a once propietarios, incluida la Fundación Álvarez Carballo, con una finca de nueve hectáreas. La parcela más pequeña es de 990 metros cuadrados. Un suelo que oculta aún muchos secretos, pese a décadas de expolios. Pese a que estos terrenos se encuentran protegidos —Lancia es Bien de Interés Cultural (BIC)— y prácticamente no pueden destinarlos a ningún uso, algunos propietarios son reacios a desprenderse de ellos. Las indemnizaciones no son altas —29 céntimos el metro cuadrado—, y tal vez su intención se elevar el precio. El yacimiento propiedad de la Diputación, de apenas 1,5 hectáreas, está ‘estrangulado’ por estos once solares.
Sacar a la luz el «último bastión» astur que resistió a la conquista romana será cuestión de años. El territorio es inmenso y la idea es preservar todos los restos que salgan a la luz. Un proyecto tan colosal que nadie se atreve a poner plazos.
Aunque antes de fin de año se pasará el georradar, no es un ‘barrido’ a ciegas, ya que hace años se hicieron vuelos de prospección del yacimiento.
Bajo la autovía también hay impresionantes restos, como un barrio industrial en el que existían fundiciones, la primera necrópolis de incineración localizada en León, un tramo de calzada romana, un horno de finales del siglo I dedicado a la cocción de tejas, otro medieval, unas termas y un edificio de planta basilical.
Miles de piezas han sido extraídas del yacimiento, desde monedas a molduras de mármol, ladrillos con la marca del alfarero, fíbulas, ánforas, mosaicos y restos vinculados a la época prerromana y piezas celtibéricas. La existencia de numerosos baños públicos en todo el yacimiento avala las tesis sobre la elevada población que llegó a concentrar Lancia, aunque Celis dude que fueran 30.000 habitantes.