Fran de Gonari
"Hace falta humor, amor y paciencia"
El polifacético Fran de Gonari es vestuarista en "Histerias de amor"
Resulta que este entusiasta convencido de la belleza interior se dedica a la exterior. Como artista plástico en general. Pero otra de sus facetas es la de vestuarista y figurinista. Uno de sus últimos trabajos en esta faceta es en teatro, en Histerias de amor , de la compañía Martelache. El montaje tenía previsto ser estrenado mañana en León, pero la covid-19 se ha encargado de aplazarlo al detectarse un caso entre los miembros de la compañía.
Por las manos de Fran de Gonari han pasado los cuerpos de Verónica Forqué, Julieta Serrano, Kira Miró, Áurea Garrido, Asier Etxeandia, Mísia, Olga Pitarch o la diva Sheena Easton. Y aunque se trata de lo que luego a primera vista se verá en términos de espectáculo, su propuesta siempre vuelve al interior. De hecho, sobre esta lista de ilustres puede decir: «Dama del teatro y de la vida», sobre Julieta Serrano. O destacar la potencia interpretativa de un Etxeandia, por ejemplo. Es decir, que trabaja en la superficie pero no en lo superficial, y sí para que prevalezca la personalidad del personaje y de quien lo sustenta.
«Para mi, trabajar como figurinista y vestuarista es un placer enorme porque en teatro se trabaja mano a mano, de iguales, con horizontalidad. En concreto, en este trabajo me gusta encargarme de pies a cabeza, de lo que llevan puesto, de la peluquería. De pies a cabeza el personaje nos cuenta algo. Lo primero que se ve de un personaje es su aspecto, su vestuario», explica.
Una de las obras más representativas de Fran de Gonari. DL.
Y en concreto, en este Histerias de amor , lo que aporta Gonari es al servicio, tal y como explica, de «lo nuevo, y muy deseado, de Martelache. Compañía independiente con una gran trayectoria. Chema Rodríguez Calderón, Juanma Cifuentes... Todos tienen una carrera más que importante y reconocida. Y es una comedia que refleja los miedos, miserias y bondades de las personas y la sociedad actual. Todos los personajes, varios en cada acto, son enfermos de amor», afirma al respecto de la obra.
Para sobrellevar el tiempo actual, De Gonari asegura que el tipo de trabajo ayuda: «Los creadores somos en este sentido unos privilegiados. Logramos aliviar la dureza de lo que vivimos a través de lo que hacemos», dice. Eso sí, las exigencias actuales resultan de suma exigencia: «Hay que ser infinitamente más delicado aún en cuanto a la aproximación del actor. Vivimos en una burbuja de alcohol hidroalcohólico. Hace falta humor, amor y paciencia. Se pueden enviar mails, pero llega un momento en el que es necesaria la proximidad física», advierte.
Y si hubiera que soñar en algún personaje, aunque Fran de Gonari es un gran creador pero con los pies en el suelo se permite el lujo de soñar: «Me hubiera gustado vestir a Rita Hayworth», afirma, con lo que abre paso a la mitomanía.