Taraborrelli desnuda a Madonna en una biografía no autorizada
«Una mujer descarada, engreída, irritable y exagerada», así dibuja a la Madonna de los 80, en una biografía no autorizada, J.Randy Taraborrelli, quien desvela los pormenores de la vida de uno de los iconos musicales de finales del siglo XX y principios del XXI. «Todo lo que es hoy, se lo ha ganado a pulso», afirma. J.Randy Taraborrelli, biógrafo también de Michael Jackson y Frank Sinatra, conoció a Madonna Louise Veronica Ciccione en una rueda de prensa en 1983, cuando «estaba dispuesta a no fingir nunca ante los medios de comunicación y se mostraba tal como era, sin vacilar». Cuando Taraborrelli retomó en 1994 al personaje para escribir este libro, Madonna ya «había establecido las prioridades de su vida: su carrera por encima de todo. Hasta que una vez satisfecha de su trayectoria, se centró en sus hijos, Lourdes y Rocco». El libro arranca con la visita que Madonna, camuflada en la parte de atrás de un coche, hizo al presidente Carlos Menem, para que este autorizase el rodaje de Evita en Argentina. Fueron unas horas, pero la negativa generalizada del país a la película duró tan sólo unos días más después del encuentro. Nacida en Michigan el 16 de agosto de 1958, Madonna, aunque mitad canadiense francófona, siempre se ha identificado más con su herencia italiana. Nacida en el seno de una familia «estricta y chapada a la antigua», como ella misma definió, desde niña estuvo siempre muy unida a su madre, hasta que falleció. Entonces comenzó su odio hacia la figura paterna y como aprender a cuidarse y a cuidar a sus hermanos, y tras el segundo matrimonio de su padre, comenzó su resentimiento contra la Iglesia católica. Taraborrelli cuenta también cómo Madonna perdió la virginidad a los 17 años con un compañero del instituto, Russell Long, quien relata en el libro todos los pormenores, aunque es ella la que unos años más tarde confesó: «No perdí mi virginidad hasta que me di cuenta de lo que hacía».