El Juli: «Aún me queda mucho por dar como torero»
En El Parque se vieron ayer cosas muy importantes, más, mucho más que los triunfos de Ponce y El Juli, y que el lleno hasta la bandera, y que los dos toros que dieron la vuelta al ruedo. El Juli, con Ponce camino del hospital, se negó a salir por la puerta grande en solitario. El gesto no pasó desapercibido para nadie. Lo destacó Manolo Molés en la apertura de las tertulias: «Es un detalle bonito que demuestra que tiene la cabeza bien ocupada. Ahora que los terreros van cada uno por su lado, es bonito que Julián haya demostrado que no se ha perdido todo». Tras confesar que se siente muy a gusto en León y que la plaza no sólo es bonita, sino cómoda también para torear, agradeció la acogida de la afición: «La gente en León siempre se entrega mucho a los tereros y es muy agradecida», dijo. Metido en mayores profundidades por el hilo conversador de Molés, El Juli habló de su momento y de su futuro: «Estoy avanzando como torero. Voy cubriendo etapas y en algún momento me impongo reflexión. Algunos han querido apartarme un poco, hacer bajar mi cotización, pero creo que sin conseguirlo. He avanzado bastante, llevo muchos toros a la espalda y, sin embargo, delante del animal me siento tranquilo. Y eso significa que me queda mucho por dar. Tengo ilusión y, pese a lo que ha ocurrido este año en Madrid, creo que se me respeta en todos los sitios». ¿Eso significa que te ves toreando a los veinticinco», inquirió Manolo Molés. «Sí», afirmó tajante. ¿Casado?. «Espero que no». José Manuel Sánchez, sólo sepado de El Juli por Antoñete, hizo también su análisis de la tarde y el entorno: «Me gusta la plaza por lo cómodo que se está. No me ha gustado el ganado. Un cartel de este nivel merece algo más. Pero también es cierto que no hay nada mejor en las dehesas». Las tertulias se cerraron con un intenso diálogo entre el médico de la plaza y El Juli, interesado por Ponce. Otro gesto que le honra.