El Oscar busca un nuevo hogar provisional en Nueva York
El Oscar, considerado el mayor premio de Hollywood, busca un nuevo hogar en Nueva York, al menos a tiempo parcial, según diferentes fuentes de la industria del cine. Una serie de conversaciones mantenidas entre la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas, encargada de estos galardones, y un grupo de empresarios y políticos neoyorquinos han estudiado la posibilidad de llevar a cabo parte de las celebraciones de los Oscar en Nueva York para ayudar en la recuperación de la ciudad. Una idea que pudiera parecer peregrina, dados los lazos entre la estatuilla dorada y Los Ángeles, ciudad que la vio nacer hace 75 años, pero que puede tener más visos de realidad de los esperados. Según Frank Pierson, que acaba de ser reelegido presidente de la organización, la idea de trasladar la totalidad de la ceremonia este año es imposible, entre otras razones por compromisos contractuales. Sin embargo, la mudanza puede ser parcial, con una «fuerte presencia» neoyorquina durante el acto de la próxima edición para mostrar el respaldo a esta ciudad, afectada por los atentados del 11 de septiembre.