FESTIVAL INTERNACIONAL DE CINE DE VENECIA
El japonés Kitano firma una parábola sutil y simbólica sobre el amor
De Haldenn, director del Festival, junto al italiano Michelangelo Antonioni
El cineasta japonés Takeshi Kitano ha ofrecido en el Festival de Venecia Dolls (Muñecas), una parábola sutil y simbólica sobre el amor, mientras, también en lucha por el León de Oro, la polaca Agnieska Holland ha sugerido un debate sobre la enfermedad y la religión en Julie walking home. Kitano ganó el León de Oro de la Mostra en 1997 con Hana-bi (Flores de fuego) y ahora ha regresado a la competición del Lido veneciano con una película en la que se entrecruzan tres historias con el amor como denominador común, y también la muerte. El caso de un joven que deja a su novia para casarse con la hija de su jefe, el dirigente de la yakuza (mafia japonesa) que regresa años después a buscar a la mujer a la que abandonó y el seguidor incondicional de una cantante de éxito son los ejes de esta película, de carácter conceptual y escaso diálogo. La fotografía, de alto nivel estético, juega un papel primordial en esta película, ya que en ausencia de diálogos la imagen adquiere una gran relevancia.