La mirada metafísica de un leonés universal

Desde sus más tempranas etapas hasta sus creaciones de madurez. De los tanteos y flirteos con el estilo pictórico de Benjamín Palencia y la Escuela de Vallecas hasta su obstinada intención por desnudar la figura humana y los volúmenes hasta sus últimas consecuencias, hasta descubrir las líneas maestras, el andamiaje básico de la expresión artística. Es la exposición retrospectiva que hoy se inaugura en la Sala Provincia del Instituto Leonés de Cultura. Una muestra que homenajea y rinde tributo a la memoria del pintor leonés Eugenio Estrada -fallecido en el verano de 1996-, y cuyo trabajo, como artista, investigador y docente constituye uno de los ejemplos más completos de artista curioso e inquisitivo, receptivo a todas las influencias y corrientes de su tiempo pero a la vez capaz de construir una línea de exploración personal y exclusiva, fructífera. A partir de hoy, tal y como explicó Alfonso García, director del ILC, todos los leoneses podrán apreciar, de una manera global, esta extraordinaria muestra de la capacidad creativa de uno de nuestros más reconocidos paisanos, como suele ocurrir, más fuera que dentro de su tierra. Se trata de «un intento de recuperación de uno de los grandes pintores de León -comentó Alfonso García-, un hombre con una «magnífica calidad pictórica». Tanto él como Luis García, director del Departamento de Exposiciones del ILC mostraron su agradecimiento a la colaboración de la familia del artista -algunos de cuyos miembros se encontraban también en la presentación arropando a la viuda del artista, María Jesús Callado- en la recopilación de las distintas obras. Luis García, por su parte, también esbozó algunas de las etapas y los hilos fundamentales de la trayectoria de este artista, Doctor en Bellas Artes por la Universidad Complutense, y recordó su proceso de «depuración» pictórica que le llevó, desde un particular expresionismo, a deconstruir y reducir a volúmenes geométricos la figura humana para finalmente alcanzar un fascinante y limpio estado de pureza en sus obras. Eugenio Estrada nació en Cubillas de Rueda en 1935. En León tomó contacto con el ambiente intelectual de la época y estudió en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. Vivió en Colombia por dos años, y a su vuelta, entre cientos de exposiciones y premios, se afincó en Zaragoza donde dedicó la mayor parte de su tiempo a una de sus pasiones, la docencia.