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Iluminación artística

La luz que sacará los colores a la Catedral

Mostrar la Pulchra con su policromía original. Ese es el objetivo del plan en el que trabaja el Ayuntamiento para rescatar con juegos de luces los azules, rojos y dorados primigenios de Santa María

Imagen de la policromía que aún puede admirarse en la piedra de la portada. RAMIRO

León

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En el año 2005, un equipo de investigadoras integrado por Mercedes Cortázar, Dolores Sanz e Isabel Cubillas, realizaron un meticuloso análisis en la piedra de la Catedral con el fin de ‘sacarle los colores’ al templo.

Durante varios meses se realizaron estudios científicos (recopilación de documentación, estudios del tipo de labra, correspondencia de policromías y estudio del estado de conservación) con la doble finalidad de detallar cómo trabajaron los constructores de la Pulchra, qué colores y técnicas utilizaron y cuál es el estado de conservación de la piedra. Los resultados mostraron que en la Catedral de León hay tres capas de policromía que se fueron añadiendo a lo largo de los siglos XV y XVI. La primera de ellas se sirvió de policromía al óleo y utilizó una técnica conocida con el nombre de ‘brocado aplicado’. Las expertas destacan que esta manera de trabajar la piedra se caracteriza por su preciosismo y era desarrollada por maestros de los Países Bajos. Este método artístico se caracterizaba por la aplicación de láminas de oro y lacas y está presente en todas las portadas de la Catedral, lo que da una idea de la riqueza ornamental que llegó a taner la iglesia de Santa María. En una segunda fase, la Catedral se cubre con una segunda capa de color más pequeña, que aún puede verse en la portada de la Virgen del Dado (la que da paso al claustro) y cuyo autor se cree pudo ser León Picardo. Sobre estas se aplicó una nueva capa en el siglo XVIII (esta vez monocroma), que es la que vemos en la actualidad.

Tres capas
La primera policromía utilizó una técnica conocida como de ‘brocado aplicado’

Ahora, casi veinte años después, el equipo de gobierno, a propuesta d la UPL, trabaja en dotar a la Catedral de León de una iluminación artística. El presupuesto, dispondrá de 240.000 euros para recuperar la imagen que la fachada principal tuvo en su origen. No se hará una iluminación dinámica, como la que se exhibe en San Isidoro desde Las Cabezadas hasta las Cantaderas, sino que se optará por una propuesta estática que se mantendrá a lo largo de todo el año. El proyecto pasa por recuperar la policromía del triple pórtico ojival. La imagen se asemejará a la que presenta la puerta de la Virgen del Dado, que da acceso desde el interior del templo hacia el claustro y se conserva al no estar a la intemperie, pero en este caso con el juego de los colores conseguido a partir de la iluminación.

La iluminación del triple pórtico ojival se complementará con más elementos. La propuesta esbozada por la Unión del Pueblo Leonés, promotor de la idea, plantea una iluminación desde dentro hacia fuera para resaltar las vidrieras, como la que se hizo durante la exposición de El Sueño de la luz.