Un contrato muy singular en el Auditorio
La obra, con motivo del Día Internacional del Orgullo LGTBI, está protagonizda por Alba Muñoz y María San Miguel
Alba Muñoz y María San Miguel protagonizan ‘El contrato’. DL
Lugar: Auditorio Ciudad de León.
Hora: 19.30.
Entrada: gratuita (invitación en taquilla).
El Auditorio Ciudad de León acoge, a las 19.30 horas, el montaje teatral El contrato, una actuación organizada por la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de León, con motivo de la conmemoración del Día Internacional del Orgullo LGTBI. El montaje de la Compañía Teatro de la Riada y Proyecto 43-2 está basada en la obra de Carmen Resino —escrita en 1973, inédita y no estrenada hasta ahora—, bajo la dirección de María San Miguel y cuenta la historia de Jasica y Nora (Alba Muñoz y María San Miguel), dos mujeres que comparten apartamento y una relación extraña y no definida. Después de mucho tiempo, ha llegado el momento de derribar un muro que les ha oprimido y obsesionado: quieren acabar con él aunque eso está prohibido por contrato desde el principio.
La función, que tiene entre sus objetivos la erradicación de cualquier tipo de violencia relativa a dichos colectivos y que León sea una ciudad plenamente igualitaria, está financiada por el Ministerio de Igualdad a través de la Secretaría de Estado de Igualdad y Contra la Violencia de Género.
El Contrato es la historia de dos mujeres, que sin herramientas ni permiso, se enfrentan a un muro que les ha distorsionado su visión sobre el mundo. Nora y Jasica son dos mujeres complejas, en movimiento. Con múltiples conexiones con el contexto social y cultural en el que viven. Dos mujeres que se construyen a partir del encuentro con la otra.
«El contrato no es una obra realista, el problema vital que se plantea puede suceder en cualquier lugar y hasta me atrevería a decir que en cualquier época; eso junto a su lenguaje directo más conceptual que coloquial, confieren a la obra un carácter universal y en absoluto localista. Tal vez por esa concepción de la misma, no ha envejecido a pesar del tiempo transcurrido; porque El Contrato está tal cual salió entonces, sin enmiendas, rectificaciones, eliminaciones o añadidos. Salió espontánea y dolorosamente limpia y sigue dolorosamente limpia y creo, vigente», según Carmen Resino.