Fue una muerte anunciada
La última campanada de la iglesia de Pozuelo
Los vecinos esperaban el fatal desenlace con la cámara de fotos preparada. En 2003 el campanario de la iglesia, del siglo XVII, se vino abajo, aunque el templo llevaba ocho meses cerrado por temor al desplome. Ahora Pozuelo del Páramo quiere reconstruirlo. Patrimonio pide un estudio histórico previo antes de autorizar la intervención.
Del campanario del siglo XVII de la iglesia de San Pelayo no ha quedado ni una sola piedra. «Se desescombró todo. Era más tierra que piedras», afirma el pedáneo de Pozuelo del Páramo, Óscar Manuel Pisabarro (PP).
Han pasado 18 años desde que la torre se desplomó, pese a los avisos reiterados de los vecinos al Obispado de Astorga, que acabó enviando un emisario. «Visitó la localidad, sacó fotos y aseguró que los temores de los vecinos eran exagerados, que no estaba para caerse, que eran simples grietas», denunciaron entonces miembros de la asociación cultural El Lagar. Lo cierto es que la humedad había provocado daños irreparables en la frágil estructura.
«Hasta ahora no se ha podido reconstruir porque no había subvenciones», asegura Pisabarro. El Ayuntamiento espera que el Instituto Leonés de Cultura (ILC) les conceda buena parte de los 100.000 euros que costará erigir el nuevo campanario. También están pendientes de la cesión del terreno por parte del Obispado de Astorga, que en 2003 prometió arreglar la torre caída «a la mayor brevedad posible». Los vecinos colocaron una lona provisional y finalmente se tapó el gigantesco boquete. Pero no hubo más obras.
Curiosamente, tres años antes del estrepitoso derrumbe ‘en directo’ —captado por las cámaras fotográficas de los vecinos—, tanto la cubierta de la iglesia como la del campanario habían sido renovadas por completo.
El derrumbe, captado en la imagen de la derecha por vecinos de Pozuelo del Páramo.
El PSOE no ha respaldado la iniciativa del Ayuntamiento de Pozuelo del Páramo. Se abstuvo, según explica el concejal Néstor Fernández Cabañas, porque a pesar de estar de acuerdo en levantar un nuevo campanario —«estaba en nuestro programa electoral y ellos que llevan gobernando doce años no se habían acordado»—, en su opinión, «la subvención que han solicitado no encaja en el Programa R (Rehabilitar, recuperar y reactivar) del ILC».
Según el diputado de Cultura, Pablo López Presa, hasta finales de este mes o principios de agosto no se resolverán las subvenciones del citado programa, dotado con seis millones de euros, para restaurar castillos, fortalezas, palacios, casonas o yacimientos en localidades leonesas de menos de 20.000 habitantes.
De la torre defenestrada, de unos doce metros de altura, únicamente se salvaron las campanas, que no sufrieron daños y están guardadas desde entonces en el Ayuntamiento.
Un estudio histórico previo
La Comisión Territorial de Patrimonio, en su reunión de ayer, consideró conveniente la realización de un estudio histórico del campanario original de la iglesia de Pozuelo del Páramo, en el que se base la propuesta de intervención para su recuperación. Recuerda que esta iglesia es un bien integrante del Patrimonio Cultural y la intervención planteada por el Ayuntamiento tiene por objeto la recuperación del campanario derruido.
La iglesia de San Pelayo, un edificio del siglo XVII que custodia en su interior un retablo barroco, no sufrió desperfectos aquel fatídico 20 de abril de 2003.