Alfonso Sastre, dramaturgo radical y combativo, muere a los 95 años

Dramaturgo radical, combativo e incómodo. Ensayista, poeta y militante de izquierda muy próximo al mundo abertzale, Alfonso Sastre falleció este viernes a los 95 años en Hondarribia, localidad guipuzcoana en la que vivía retirado desde hace años. Desarrolló una intensa actividad literaria y teatral marcada por su lucha antifranquista y una profunda inquietud social y política. Adscrito a la generación de los 50, fue Premio Nacional de Teatro en 1985 por 'La taberna fantástica' y Nacional de Literatura Dramática en 1993 por 'Jenofa Juncal'. En 2003 recibió el Premio Max de Honor por su contribución a la creación teatral. Nacido e Madrid el 20 de febrero de 1926, fue hijo de un actor de teatro y una trabajadora. Tras concluir sus estudios de Filosofía y Letras, inició una intensa actividad literaria alternando el teatro con la poesía y la narrativa. Con el grupo 'Arte Nuevo', fundado en 1945, Sastre dio a conocer su primeras obras, como 'Escuadra hacia la muerte', drama en dos actos estrenado por el Teatro Popular Universitario en 1953 y en el que un grupo de soldados se encuentra castigado en una Tercera Guerra Mundial se subleva asesinando al cabo. Fue prohibido a la tercera representación.

Su teatro revolucionario y militante continuó con títulos como 'La mordaza', una crítica encubierta a la dictadura, 'Tierra roja', 'La sangre de dios', 'La sangre y la ceniza', 'La taberna fantástica', escrita en 1968 y estrenada 1985 y en la que, con apariencia de sainete, aborda el tema del lumpen y la marginalidad, o 'Askatasuna!' Enfrentado a Buero En pleno franquismo, Sastre polemizó con Antonio Buero Vallejo sobre el modo de combatir a la dictadura con el teatro para cambiar la sociedad. Buero defendía el posibilismo, esto es, aprovechase los resquicios de férrea censura franquista para intentar cambiarla desde dentro, algo que Sastre consideraba una claudicación.

Su teatro radical chocaba con la censura y la desgana de los empresarios teatrales para meterse en líos con obras como 'Tragicomedia fantástica de la gitana Celestina', 'El viaje infinito de Sancho Panza', 'Jenofa Juncal, la roja gitana del monte Jaizkibel', 'Los últimos días de Emmanuel Kant contados por Ernesto Teodoro Amadeo Hoffmann', 'Alfonso Sastre se suicida' o 'Drama titulado No'. Como narrador publicó 'El Paralelo 38', 'Las noches lúgubres', 'El lugar del crimen' o 'Historias de California' Fue autor de poemarios como 'Balada de la cárcel de Carabanchel y otros poemas celulares', 'El Evangelio de Drácula', 'El español al alcance de todos', 'Vida del hombre invisible contada por él mismo', y 'Obra lírica y doméstica'. Su actividad política fue tan intensa como la literaria. Militante Partido Comunista en pleno franquismo, en 1956 fue encarcelado por su participación en las protestas universitarias contra la dictadura. Su pareja, Eva Forest, fue detenida en 1974 por su presunta implicación en el atentado de la calle Correo de Madrid, que causó doce muertos.

Sastre fue encarcelado y procesado y pasó ocho meses y medio en prisión antes de ser puesto en libertad provisional. En 1975 se estableció en Burdeos, donde permaneció año y medio, antes de ser expulsado por las autoridades francesas y fijar su residencia en Hondarribia. Desde entonces su actividad política se ligó a la izquierda abertzale. En 1980 fue detenido acusado de dar refugio a un comando de ETA.

Tras difundirse la noticia de la defunción a Sastre, la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) comunicó que el pasado 25 de marzo aprobó otorgarle la Medalla de Honor, que debería entregarle el 4 de octubre el presidente de la entidad, Antonio Onetti, con motivo de los Premios Max de las Artes Escénicas. La distinción le será entregada a título póstumo.