Archivo histórico
León salva música medieval usada para forrar manuscritos
El Archivo Histórico atesora más de 3.000 fragmentos de pergamino de música sacra Las Juventudes Musicales ‘airean’ estos fondos en un concierto en el Auditorio
El Archivo Histórico Provincial es una gran almacén ‘sin fondo’. Un gigante que crece sin parar. Ahora mide 42 kilómetros lineales de papeles y legajos, entre los que se oculta un pequeño tesoro musical prácticamente inédito. Un material que ha pasado desapercibido hasta para los investigadores.
La directora del Archivo, Eva Merino, lleva tiempo intentando ‘desempolvar’ este legado que «apenas es consultado porque no se conoce su existencia», admite. La idea inicial era mostrar en una exposición manuscritos, partituras y la historia de músicos y bandas y celebrar un concierto a cargo de las Juventudes Musicales en el patio del Archivo, ubicado en el que un día fue el castillo de León. Pero la pandemia truncó los planes.
Imagen de archivo de la Orquesta de las Juventudes Musicales que dirige Juan Luis García. DL
Finalmente, año y medio después, el Auditorio Ciudad de León acoge hoy el recital, en el que se proyectarán algunas imágenes con los fondos musicales más llamativos del Archivo que dirige Merino. Hay más de 3.000 fragmentos de pergamino, mayoritariamente de música sacra, que llegaron a Puerta Castillo como ‘forros’ de protocolos notariales. Merino explica que hace siglos algunos notarios encuadernaban sus escritos reutilizando como cuero viejo pergaminos en los que había escritas, entre otras cosas, partituras musicales. Los 3.000 que ha rescatado el archivo leonés están fechados entre los siglos XII al XVI. Pero hay otras ‘joyitas’. Entre los fondos musicales más curiosos están los carnés de músico de la época franquista, con la foto del intérprete y el instrumento que tocaba, de forma que se puede escribir una historia de la música en León de prácticamente medio siglo XX. También hay programas de conciertos y veladas musicales, expedientes de numerosas bandas, como la del Hospicio. cotizaciones del régimen especial de artistas, gestión de bandas de música...
Un concierto singular
«Los músicos tenemos mucha relación con los archivos. No es un sitio que almacena cosas, sino un lugar de estudio y recuperación histórica», asegura Juan Luis García, director de las Juventudes Musicales. Cuenta que el la pandemia frustró el concierto que tenían planeado en el Archivo, pero, en su lugar, grabaron en la iglesia de los Descalzos, un edifico del siglo XVII poco documentado, que fue sede de la Escuela Veterinaria y estuvo brevemente abierta al culto en los años 70, hasta que fue anexionada por el Archivo para albergar 7.500 metros de estanterías. Entre esos legajos, las Juventudes Musicales grabaron un vídeo que permitió a la formación seguir ‘en activo’ durante el largo confinamiento.
El Auditorio albergará, a las 19.30 horas —con entrada gratuita—, Música y documentos, el concierto con el que la Orquesta de Juventudes Musicales-ULE pretende difundir el fondo documental conservado en el Archivo Histórico vinculado con el mundo de la música.
En el atril pondrán obras de Johann Joachim Quantz (dos movimientos de su Concierto para Flauta); además de dos valses, obras de Piazzolla y de Rupert Gregson-Williams, entre otras. También La danza de la ceremonia de la pipa de la paz, perteneciente a la ópera-ballet Las Indias galantes, de Jean-Philippe Rameau, que las Juventudes Musicales interpretaron en diez actuaciones durante seis días para acompañar uno de los espectáculos del ciclo Danza en el Camino que se pudo ver en León en julio.