El enigma de la cripta de Cascalerías

Dos años de excavaciones y obras han permitido conservar un túnel romano del siglo I, situado en el número siete de la calle Cascalerías, a seis metros de profundidad respecto al nivel de la calle. La cripta, que figura incluida en una «ruta romana» diseñada por el Ayuntamiento, pero que aún no se ha abierto al público, encierra en su interior los restos de una galería de 60 metros de largo, casi tres de alto y una anchura de metro y medio -se prevé que es aún más larga-, cuya utilidad sigue siendo un auténtico misterio para los arqueólogos, que no han consegudio descifrar las funciones de esta enigmática construcción. En un nivel superior, a modo de terraza, se asentarían uno o varios edificios, de los que no se han encontrado vestigios y que estarían comunicados por este pasadizo. El túnel habría quedado inservible a finales del siglo III.