El enigmático leonés Stickerman también lleva su arte a Valladolid
Misterioso y enigmático, y como en muchos casos de expresiones del arte urbano: anónimo. Tal vez, en ese estado de desconocimiento su arte se libere y como le ocurre a Stickerman le permita llegar a lugares que no había ni sospechado: Valladolid. Tampoco es que haya cruzado el charco, pero la leyenda Stickerman se engrandece ahora.
La sala Les Paul (Empecinado, 5) acoge con tal motivo una exposición sobre esta disciplina artística que se expande imparable, por el mundo. hasta finales de Octubre. Y el protagonista será Stickerman (entrada gratuita de jueves a domingo a partir de las 20:30h).
Tras el seudónimo de Stickerman se esconde un artista que rompe las barreras de su cotidianidad y el encorsetamiento de sus obligaciones laborales vinculadas al diseño gráfico para dejarse llevar por una necesidad creadora libre, y con el firme deseo de mejorar las tristes rutinas de sus conciudadanos, con mensajes enviados desde pegatinas cargadas de positividad y esperanza, pero también de crítica social e incluso de humor, un guiño; ya libre de ego, que intentan provocar un sentimiento. «Diseñador de día, ‘artivista’ de noche», son sus únicas declaraciones.