Lancia sale a concurso
La Diputación saca este mes a licitación el futuro Centro Arqueólogico La inflación dispara en un millón el coste de la obra hasta los 3 millones de euros
Desde época romana no ha habido obras de construcción en Lancia. Un paraje ‘desierto’ durante diecisiete siglos, con tesoros en el subsuelo. Este mes la Diputación sacará a concurso la construcción del Centro Arqueológico, según el proyecto de Gonzalo Pardo, al frente del estudio madrileño Gon Architects, ganador del concurso convocado por el Instituto Leonés de Cultura (ILC). Se trata de tres edificios situados al borde de los restos visibles del yacimiento.
El futuro museo iba a costar dos millones de euros, pero, finalmente, serán tres. «Una inversión nunca vista en un yacimiento arqueológico en León», afirma el diputado de Cultura, Pablo López Presa. El proyecto se ha encarecido por el alza de los precios y una excavación no prevista, presupuestada en 100.000 euros. Estos nuevos sondeos son una condición impuesta por la Comisión Territorial de Patrimonio, que ayer dio el visto bueno al proyecto de ejecución del Centro Arqueológico en la ciudad astur-romana.
No ha sido el único impedimento de Patrimonio, que exigió, además, otra excavación previa, lo que ha retrasado en ocho meses la redacción del proyecto de ejecución. Los trabajos arqueológicos se llevaron a cabo en verano. El objetivo era certificar que bajo los tres edificios que se van a levantar en Lancia no hay restos musealizables. Sí aparecieron infinidad de objetos, sobre todo monedas y vasijas, no solo de época romana, sino también de la Edad de Hierro.
López Presa prevé que la obra se pueda adjudicar antes de acabar el año y que la construcción comience en el primer trimestre de 2023 y concluya quince meses después. El próximo año se contratará la museografía del Centro Arqueológico, donde se expondrán piezas descubiertas en el yacimiento.
La última ciudad astur que resistió frente al Imperio Romano recuperará su paisaje original. Es el punto fuerte del proyecto de Gon Architects, que cuenta con la máxima categoría del sello verde, un certificado que premia la sostenibilidad.
Bajo el follaje
Plantarán arbustos, frutales y los cultivos que tenía Lancia cuando estuvo habitada por astures y romanos. Bajo los macizos de plantas se «camuflarán» tres pequeños parques fotovoltaicos, para suministrar energía al complejo.
Los tres edificios están alineados en orden creciente. El primer pabellón, de 90 metros cuadrados y de tres a cinco metros de altura, será el centro de recepción de visitantes. A 123 metros de distancia, se sitúa el centro de interpretación del yacimiento, de 287 metros cuadrados y de cuatro a seis de altura. Albergará una sala de exposiciones y otra multiusos, así como un almacén. El último edificio, de 439 metros cuadrados, está pensado como zona de trabajo e investigación para los arqueólogos. Con una altura variables de tres a siete metros, alojará un laboratorio y zonas de inventario y restauración de restos arqueológicos.
El presidente de la Diputación, Eduardo Morán, anunció al principio de su mandato que Lancia sería una de sus prioridades. La Corporación Provincial adquirió el año pasado diez hectáreas a propietarios particulares para ampliar el yacimiento. Hace unos meses se llevó a cabo la limpieza y restauración de los restos que son visitables y se hicieron excavaciones para sacar a la luz el foro romano.
Durante décadas Lancia ha sufrido expolios. Miles de piezas están desperdigadas por colecciones privadas e instituciones. Sin embargo, el año pasado una columna, de 2.000 años de antigüedad, que sostenía la galería porticada del mercado romano, volvía a su lugar de origen tras pasar 35 años en el patio del ILC.