Mercedes Fisteus: «León es un territorio de brujas»

A Mercedes Fisteus siempre le han fascinado las brujas. Les dedicó su primera novela, Dentro de dos años, ambientada en los famosos juicios de Salem. De aquel libro se llevó el reconocimiento del público, el premio  Ateneo Joven de Sevilla y una ingente documentación sobre magas y nigromantes. Fisteus, natural de Villablino, conocía muchas historias mágicas de la comarca lacianiega, gracias a la tradición oral, preservada en los filandones. Esta profesora de la Universidad a Distancia (Uned) impartió dos cursos sobre La bruja en las leyendas y el imaginario popular y Las brujas y su mundo: magia, historia y arte, este último actualmente en marcha y con posibilidad de matricularse online. 

 

Con todo este material acumulado decidió publicar un nuevo libro, La hechicera errante. La bruja en las leyendas y el imaginario popular (Editorial Algaida), un ensayo novelado que reúne todas las historias de brujería del mundo. Aunque parezca un tema inabarcable en un solo volumen, la escritora explica que algunas historias se repiten, con pequeñas variantes, en  muchos países. 

 

Durante la promoción de su novela conoció a  la investigadora María Jesús Torquemada, que le explicó que mientras las brujas del norte hacían aquelarres, las del sur actuaban solas. «Me empecé a fijar en España, donde las hechiceras son particulares, y me di cuenta de que había mucho que no sabía», cuenta. Así que decidió explorar.

 

La protagonista de La hechicera errante llega a España atravesando los Pirineos y recorrerá primero el norte del país, donde escuchará las leyendas de las brujas de Vega del Palo —un aquelarre multitudinario de Laciana—; la historia de la bruja Haeda, que creó el carbón, en Pola de Gordón; o las costumbres locales de elaborar amuletos con dientes de animales, de osos, de lobos o jabalíes, así plantas protectoras, como los saquitos de alcanfor y ruda. 

 

«León es bastante místico, bebe de la tradición norteña y es uno de los muchos escenarios que atraviesa la protagonista, que viaja por toda España, amén de otros países», dice Fisteus.

 

La autora afirma que «León siempre ha creído en las brujas», de ahí que  aún pervivan algunas creencias sobre amuletos y objetos protectores para defenderse de los hechizos —como el alcanfor que se colocaba en las cunas de los niños—. «León es un territorio de brujas, una provincia muy esotérica», como atestigua la abundancia de leyendas. A la escritora le interesa la figura de la bruja y su relación con las mujeres. La hechicera errante es un libro muy documentado. 

Historia de la hechicería

La autora ha consultado decenas de ensayos y bibliografía sobre el tema, ha ‘revuelto’ en iglesias, donde ha encontrado sentencias inquisitoriales muy curiosas, y también ha rescatado documentos muy raros custodiados en la Biblioteca Nacional de España. 

 

 

Asegura que en las 280 páginas del libro ofrece al lector todos los elementos que rodean a la bruja. El ensayo incluye, al final, varios anexos, para quien quiera profundizar sobre la bruja en el arte, la literatura, la música y el cine. El libro, además de novelado, es de carácter recopilatorio y está ilustrado. Un texto muy ameno sobre la evolución de la magia y la brujería, a través de las vivencias de su protagonista, una hechicera inmortal que irá contando en primera persona sus viajes a lo largo de todo el mundo, desde las primeras edades y las antiguas civilizaciones hasta la actualidad, pasando por todos los continentes y deteniéndose en sitios especiales: entre ellos, España, que la autora define como «el país de las brujas». A través de las experiencias de esta hechicera entenderemos qué es la bruja desde una perspectiva universal, para lo cual se recogen mitos, leyendas, explicaciones y numerosas referencias artísticas.

 

 «Ser bruja está de moda», afirma Fisteus, quien se ha topado con muchísimo material sobre las cazas de brujas. «Era necesaria una obra que aglutinara todo, de manera que se entendiera el fascinante mundo de las brujas».