Diario de León

El monasterio de San Miguel hecho a piezas

Jesús de Lucas exhibe en la biblioteca del propio monumento el edificio que ha construido con el juego Exin Castillos

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Exin Castillos es un juego de construcción que causó furor allá por los años setenta y ochenta del siglo pasado.Jesús de Lucas es un apasionado de estos juguetes e invirtió parte de su tiempo libre en construir, con piezas de este juego, el monasterio de San Miguel de Escalada.

El autor recuerda con cariño Exin y quiso hacer un homenaje al pueblo de su mujer con el monasterio de San Miguel a escala, con piezas de este juego y otras fabricadas en una máquina 3D, en un proceso que duró tres meses. «Me he divertido muchísimo» afirma el autor.

Un trabajo complicado, ya que Exin Castillos quebró hace años y ya no se fabrica. Jesús de Lucas es un coleccionista, por lo que guardaba miles de piezas de las últimas ediciones.

Una pasión dormida que resurgió a finales de los años 90, cuando otra empresa compró los derechos de este juego y lanzó modelos de castillos más grandes, con más piezas y detalles.

El conjunto Exin Castillos era conocido por sus materiales de alta calidad y piezas detalladas, que incluían muros, torres, torreones, techos, puertas y varios accesorios, como banderas y figuritas. Permitió a los usuarios ejercitar su creatividad y construir castillos personalizados o replicar fortalezas históricas, como es el caso de Jesús de Lucas, que quiso rendir homenaje a dos aspectos importantes de su vida y darles una salida artística.

El monasterio de San Miguel de Escalada fue fundado en el siglo IX (alrededor del año 913) por un monje mozárabe llamado Santo Genadio. Los mozárabes fueron cristianos que vivieron bajo el dominio musulmán en la Península Ibérica y mantuvieron sus tradiciones y prácticas cristianas. El monasterio fue construido en estilo arquitectónico mozárabe, que mezclaba influencias visigodas, islámicas y románicas.

De Lucas confiesa que se propuso hacer esta construcción para promocionar el pueblo y sus elementos culturales, ya que al pasar por la ruta del Camino de Santiago lo visita mucha gente.

La recreación cuenta con cientos de piezas específicas y otras incorporadas con impresora 3D, que según el autor «estuvo funcionando día y noche». El monasterio tiene un metro de largo por 60 centímetros de ancho. «No quería trasladarlo al principio, ya que yo vivo en Vigo y cuando finalmente accedí hubo muchos problemas, sobre todo, porque no cabía en el ascensor y mi piso es un noveno», explica Jesús de Lucas.

El autor asegura que tendrá su monasterio allí hasta que la Asociación Cultural de Escalada quiera tenerlo.

Un monasterio dentro de otro

Para disfrutar por completo de la maqueta es necesario conocer los detalles del monasterio, los planos, para poder detectarlos en la obra y tratar de asociarlos. Jesús de Lucas destaca que lo más interesante es, sabiendo los secretos del monasterio y su arquitectura, hasta dónde él ha llegado con su recreación y cómo lo representa. La distancia, las piezas o las ventanas, por ejemplo.

Con mucho esfuerzo y dedicando una media de cinco a seis horas diarias consiguió terminar la maqueta, que ahora esta expuesta para el disfrute de todos y permite desenterrar recuerdos de los niños que construyeron su infancia con Exin Castillos. La maqueta se puede visitar —de momento por tiempo indefinido— en la biblioteca del propio monasterio, que también alberga actualmente una exposición de pintura. De Lucas admite donaciones de piezas de Exin Castillos, porque tiene la intención de seguir haciendo obras tan espectaculares como esta.

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