Al Palacio del Conde Luna le llueven goteras
El regreso de las lluvias puede agravar la situación del artesonado gótico por el que se filtra el agua El Centro de Interpretación del Reino de León ofrece una imagen pésima, con calderos en el interior
Llueve dentro del Palacio del Conde Luna . A medida que surgen las goteras, la solución es ir sembrando cubos por las salas de un edificio que es Monumento Nacional. El agua se ha filtrado ya por el espectacular artesonado recuperado en la reforma integral del inmueble que se llevó a cabo hace catorce años, con un presupuesto de cinco millones y medio de euros. Una intervención que ahora hace agua. Si las goteras no se atajan de manera inmediata, el ‘cielo de madera’ gótico que se preserva en varias estancias podría sufrir daños irreparables. Los visitantes del Centro de Interpretación del Reino de León tienen que esquivar una zona acordonada, donde los cuencos no han evitado que el agua haya dejado su marca en el suelo de madera.
Además de la imagen bochornosa que ofrece el interior de un palacio cuyos orígenes se remontan al siglo XIV, el regreso de las lluvias puede originar otros desperfectos.
A pesar de que este periódico alertó ayer de la aparición de goteras en un edificio que fue cedido al Ayuntamiento por un período de 75 años por la Fundación Álvarez Carballo, titular del palacio, ningún partido político municipal se ha pronunciado de momento. Si se retrasa el arreglo de la cubierta, que en estos momentos parece ‘un colador’, el coste de las reparaciones se disparará. El Centro de Interpretación del Reino recibe en torno a 10.000 visitantes al año. Un museo que el Ayuntamiento de León no ha sabido rentabilizar ni mantener adecuadamente.
En 2004, cuando comenzó la rehabilitación del Palacio del Conde Luna, se hallaron ocultos, bajo los falsos techos, decoraciones del artesonado y varias series de escudos de las armas de los Quiñones, Bazán, Toledo y Pimentel. Dos de los artesonados se restauraron in situ , mientras que un tercero, decorado con motivos celestes, se retiró para permitir la rehabilitación de los elementos estructurales y se colocó con posterioridad. Ahora estos artesonados están en peligro.