Ai Weiwei: «El Musac es un museo de primera categoría»
El reconocido artista y activista chino Ai Weiwei visitó ayer el Musac, donde expondrá en noviembre
Ai Weiwei estuvo ayer en León. Solo un día. Sin embargo, el artista y activista chino afincado en Portugal, confesó: «La ciudad me ha gustado mucho». La lluvia dio una tregua y, aunque el termómetro marcaba 3 grados, el artista, con obra en los mejores museos del mundo, pudo pasear por Eras de Renueva y contemplar el cielo azul intenso de la ciudad.
Weiwei, uno de los artistas contemporáneos más valorados y cotizados, pasó más de dos horas en el Musac para ver las salas —la 3, la 4 y la 5— en las que expondrá sus obras a partir del 9 de noviembre. Será, sin duda, un acontecimiento sin precedentes.
Visita exprés
Weiwei explicó que ahora está trabajando sobre inteligencia artificial y que mostrará algo en el museo leonés. En las redes sociales, en las que es muy activo, ha hablado de un proyecto titulado Ai versus AI , utilizando su nombre y las siglas del acrónimo en inglés de Artificial Intelligence. Weiwei, que ha trabajado también como arquitecto —colaboró con los arquitectos suizos Herzog & de Meuron como asesor artístico en el Estadio Nacional de Pekín para los Juegos Olímpicos de 2008—, mostrará además algunas de las obras en las que utiliza bloques de Lego. Mientras paseaba por la ciudad, contó que colgará en el Musac su versión de Los fusilamientos , de Goya, en la que el propio Ai Weiwei aparece yaciendo en el suelo entre los ejecutados por el pelotón de soldados napoleónicos.
Visita al museo
El director del Musac, Álvaro Rodríguez Fominaya , que ha comisariado anteriormente al artista chino, será también comisario de la exposición, que llevará por título un juego de palabras: Weiwei Ai. Sobre el espacio en el que desplegará la exposición, el polifacético artista y disidente chino afirmó ayer que «el Musac es un museo de primera categoría». Weiwei es un artista combativo, sin pelos en la lengua, pero de una amabilidad infinita si se le pregunta sobre su trabajo. En noviembre una prestigiosa galería londinense le canceló una exposición por las opiniones vertidas por el artista en redes sociales sobre la guerra de Gaza. La galería aseguró que la muestra se había aplazado de mutuo acuerdo y que «no tiene sentido desencadenar un debate que pueda calificarse como antisemita o islamófobo en un momento en el que todos los esfuerzos deberían dirigirse a poner fin al trágico sufrimiento en Israel y los territorios palestinos».
Fominaya ha cumplido. Cuando aterrizó en el museo, hace más de dos años, anunció su intención de traer a artistas «que están marcando líneas en el arte contemporáneo». Sin emplear los términos famosos o celebridades, dejó caer que podrían estar en la órbita de la que fuera mujer de John Lennon, Yoko Ono; o del reconocido artista chino Ai Weiwei, que ha convertido el arte en protesta y el activismo en arte. Rodríguez Fominaya ha comisariado exposiciones de ambos. Ai Weiwei «es uno de los grandes humanistas de nuestro tiempo», subrayó el director del Musac cuando anunció hace unos días la programación del museo para este año. Asimismo, destacó que es la primera vez que el artista se involucra de tal manera en un proyecto en España.
Ai Weiwei nació en Beijing en 1957 y tuvo una infancia difícil. Su padre, el poeta Ai Qing, sufrió la persecución del gobierno comunista de China y fue desterrado a una lejana provincia occidental. En 1981, se trasladó a Nueva York, donde estudió Artes Plásticas y comenzó a trabajar como artista hasta que su padre enfermó, en 1993, y decidió regresar a su patria. Fue la época en la que grabó un vídeo en el que dejaba caer una urna ceremonial de 2.000 años de antigüedad, con la que simbolizaba cómo hacía añicos la tradición y ponía en solfa los referentes culturales.
En 2007 hizo realidad un Cuento de hadas, como tituló la emigración de más de un millar de ciudadanos chinos —él pagó los gastos del viaje— a la ciudad de alemana de Kassel, donde se celebra la feria internacional de arte Documenta.
‘Fusilado por Goya’
La web del Musac ya anuncia que la exposición de Weiwei se centrará por primera vez en las obras que desde 2007 ha creado utilizando bloques de plástico interconectables, y «es una revisión en profundidad de esta técnica que ha desarrollado en su estudio, y en particular de sus pinturas de bloques de Lego, de las que ha realizado hasta el momento 60 obras de gran formato. Para este proyecto en el Musac, el artista ha creado una versión de la obra de Goya El 3 de mayo en Madrid (Los fusilamientos). En la versión contemporánea en homenaje al pintor aragonés, entre la pila de cadáveres ejecutados aparece el retrato de Ai Weiwei».
En 2011 el artista fue detenido en China y encarcelado durante más de dos meses. El Gobierno aseguró que estaba retenido por un delito de evasión de impuestos. Su detención desató las condenas de la Unión Europea, Estados Unidos, Taiwán, Australia o Japón por producirse en medio de una de las campañas más represivas del régimen chino en décadas.
En 2017 estuvo en el festival de cine de Valladolid, la Seminci, donde sobrecogió al público con Human flow (Flujo humano), un descarnado aunque también esperanzador retrato del drama de los refugiados. Su documental, de más de dos horas y rodado en una veintena de países, apela a la responsabilidad de las instituciones para restaurar la dignidad de los refugiados y reintegrar su condición humana a través del derecho a la participación.