Reina Sofía es arte de mujer
Cultura y el museo estatal destacan el hecho de que adquieren en Arco 30 obras de 22 artistas y que 17 de ellas son mujeres, por valor de más de 553.000 euros
El Ministerio de Cultura y el Museo Reina Sofía adquirieron en Arco 30 obras por valor de más de 553.000 euros de 22 artistas, 17 de ellas mujeres. Del total de artistas, 16 pertenecen al contexto español y 6 son extranjeros (de Argentina, Brasil, Venezuela, Colombia, Guatemala e Italia).
Se trata, por tanto, de que un año más el Museo Reina Sofía refuerce su colección coincidiendo con la cita con el arte más importante que se celebra en España y que sirve además de apoyo a la feria. Una selección de 30 obras de artistas como Nuria Güell, Ana Laura Aláez, Lola Bosshard, Esther Boix, Mitsuo Miura, Ana Gallardo, Alicia Herrero, Josep Ponsatí, Miguel Ángel Rojas y Regina José Galindo, entre otros, que pasan, a partir de ahora, a formar parte de los fondos del Museo.
Con el objetivo de aumentar la presencia de mujeres en las futuras presentaciones de la Colección, el Museo ha comprado obras que representan a las nuevas generaciones creativas que dan continuidad a las poéticas feministas de los años 70, en trabajos en muy diversos medios y de muy diferentes generaciones, con especial hincapié en el apoyo a las mujeres artistas españolas. También se han incorporado obras con temáticas discursivas que nos acercan a las injusticias sociales, a la discriminación de género, a las diferentes realidades políticas intentando enriquecer el espacio que el Museo dedica en su Colección al arte latinoamericano.
Por parte del Ministerio de Cultura, que invierte un total de 401.372 euros en 20 obras de 15 artistas, se ha adquirido a la pionera de la abstracción en España, Lola Bosshard, quien se suma a dos figuras excéntricas en la figuración de las décadas de los 60 y 70, como Esther Boix o Mari Puri Herrero. El también pintor Armando exploró las posibilidades estéticas de los ovnis, mientras el artista de origen japonés Mitsuo Miura proponía experimentos con el paisaje para convertirse en los años 60 en uno de los pioneros del arte conceptual en nuestro país. Julia Montilla analiza el fenómeno de los aparicionismos y Ana Laura Aláez las consecuencias morales de la crisis del sida. Alexander Apóstol, venezolano afincado en España desde hace varias décadas, ofrece una historia política de la abstracción geométrica en su país. Sonia Navarro recupera la labor textil como un espacio comunitario y de resistencia para las mujeres.
En el caso del Museo Reina Sofía, las adquisiciones complementan lo anterior. Belén Uriel, española residente en Lisboa, se suma a las formas radicales que adopta la escultura en el presente, al tiempo que el catalán Josep Ponsatí fue en los años 70 el pionero de la escultura neumática. Las argentinas Ana Gallardo y Alicia Herrero traen el feminismo y la ironía como herramientas para explicar tanto las condiciones materiales de su propia trayectoria como la relación con el pasado colonial. La guatemalteca Regina José Galindo es una de las pioneras del arte del cuerpo, en la denuncia de la violencia contra las mujeres desde comienzos de los años 90, y el colombiano Miguel Ángel Rojas lo es con la denuncia de las condiciones de vida en una nación en conflicto.