Megara: "La gente no escucha rock porque cree que solo son gritos. Está vinculado a cosas oscuras, y no es así"
El grupo de rock español representará a San Marino en el Festival de Eurovisión tras pasar por el Benidorm Fest
Este año habrá doblete español en Eurovisión. Después de su fallido intento en el Benidorm Fest, los rockeros Megara se han sumado a Nebulossa y, representando a San Marino con la canción 11:11, intentarán superar la semifinal y hacer realidad su sueño de cantar el 11 de mayo en el escenario de Malmö, Suecia.
-¿San Marino ha sabido ver lo que España no?
-No pensamos eso. En España la gente nos abrió los brazos superbien, por eso este año intentamos volver. Nos hemos enamorado de todo lo que engloba el Benidorm Fest. Es que en nuestro año hubo mucho nivel, Blanca Paloma, Agoney..., y había que quedar en algún puesto, en nuestro caso cuartos, así que nosotros tan felices.
-Cantan: "si tú no me quieres, otra gente me querrá". Mucha gente lo ha tomado como una revancha.
- ¡Qué va! Sí que es verdad que mucha gente ha dicho eso, pero no es así. Todo lo contrario, es una canción que es un homenaje y un agradecimiento al Benidorm Fest y al eurofan.
-¿Cómo es su relación con los eurofans?
-Nos hemos enamorado de ellos. En nuestro caso, todo ha sido positivo. Es verdad que hay artistas a los que la balanza se les ha vencido hacia el lado negativo, porque, al final, la gente es muy desgraciada (ríen). Sobre todo por X. Nosotros tenemos la suerte de que los comentarios negativos han sido muy poquitos en comparación con los positivos.
-¿Se ven en la final?
-Ahí nos tenemos que ver, con esa ilusión vamos. Si no, mala cosa. Es una experiencia que queremos vivir. Además, para nosotros, y más en el sector en el que estamos, que es rock y parece que está algo más oculto, sí que ha habido una intención de darle más visibilidad. Y parece que se va consiguiendo el objetivo, porque la gente se ha abierto a escuchar nuestra discografía. Hay gente que se está enamorado de otras canciones, y son rock, así que ha sido una forma de abrir este género a otro tipo de público.
-¡Van a dividir a España!
-Preferimos quedarnos con el lema de Eurovisión, que es que vamos a compartir y a aprender del resto de los artistas. Este año hay un gran nivel. Vamos con la intención de ganar, pero si no lo hacemos no pasa nada. Lo importante es compartir con el resto de los artistas. Con Nebulossa disfrutaremos bailando Zorra. Nosotros tenemos una ventaja, que es que los españoles nos pueden votar, ¡así que por lo menos contamos con eso! Como no lo hagan, nos quedamos a vivir en San Marino (ríen).
-¿Qué opinan la participación de Israel?
-Te somos sinceros: no podemos hablar mucho del tema, pero porque no estamos lo suficientemente informados. No nos gusta hablar de lo que no conocemos a fondo. Es que no estamos al día.
-¿Y de Zorra? ¿Entienden el debate en torno a la canción?
-A nosotros nos gusta la canción, nos parece que está guay y comprendemos el mensaje. No entramos en el debate. Nosotros solo podemos decir cosas positivas de Nebulossa, que es lo que nos importa. Son muy buena gente, son trabajadores y hasta ahí podemos decir, que es lo que realmente a nosotros nos mueve ahora mismo.
-¿Cómo explicarían qué es Megara?
Somos una banda de música como el resto, pero creemos que tenemos una esencia especial que donde más se ve es en los conciertos. El vínculo con el espectador se hace más fuerte en los directos.
-¿Tienen más de siniestro o de algodón de azúcar?
-Pues mitad y mitad. Eso es lo interesante. Somos un grupo que, al final, lo que estamos haciendo es ser nosotros mismos. Echamos en un vaso todos los ingredientes que tenemos cada uno. De ahí nace la banda. Nosotros mismos somos esa simbiosis, como la oscuridad y la luz, la noche y el día o el bien y el mal. Nosotros somos un cóctel de todas esas cosas.
-¿Europa necesita rock?
-¡Europa y el mundo! Lo que necesita es no cerrarle la puerta a ningún estilo musical, da igual que sea rock, trap, reguetón, pop o techno. Todo es cultura, arte. Hay que abrirse más a todo y, sobre todos, respetar, porque al final, la música es música, y, si te gusta, bien, y si no, no lo escuches.
-¿Creen que este estilo está denostado?
-Creemos que es por desconocimiento. Lo que solemos apreciar en nuestros conciertos es que, por lo general, la gente no escucha rock porque cree que solo son gritos. El rock está vinculado a cosas negativas u oscuras, y no es así. Pero es por ese desconocimiento. Por eso sería importante que todos los estilos fueran mainstream, por así decirlo. Lo que más representa a una sociedad es que se vea esa variedad. Lo quieras o no, el rockero existe y hace mucho ruido, y para nosotros, es el público más fiel, porque lleva apoyando a los grupos clásicos años y años. Vas a un concierto de los míticos, AC/DC, Guns N' Roses, y te los encuentras llenos de gente mayor. Las grandes estrellas del rock son muy mayores. Pero es un estilo que se mantiene, el fan sigue estando ahí y abarrotando los conciertos. Es ese sentimiento lo suficientemente fuerte como para alargarlo a lo largo de los años.
-Un público al que no le vale cualquier cosa.
-Hay mucho purista, sí, pero, afortunadamente, son una minoría, aunque sean los que más ruido hacen. Tenemos la mala costumbre de que en las redes sociales nos gusta echar el odio. Al hater le mola. Al principio, lo que decían de nosotros nos hacía daño, pero luego entendimos que es una minoría infeliz. En estas cosas suele haber muchos celos y envidias. Y un mensaje: si te gusta lo que escuchas, dilo, porque hay veces que a ese artista le hace falta ese empujoncito.
-¿Creen que la industria les apoya?
-Es que la industria es business, está donde está el dinero. Lo que pasa es que es la pescadilla que se muerde la cola. No se invierte en rock porque ahora mismo no es lo que se lleva y se prefiere apostar sobre seguro, pero ¿por qué se lleva más ese estilo? Pues porque lo estás apoyando. Es una rueda de la que solo se sale apostando por otros estilos, como en este caso el rock. Es que hay festivales, teles o radios en las que el rock no tiene cabida, pero ahora han empezado a hablar de nosotros. Por eso estamos tan contentos de haber participado en el Benidorm Fest y, ahora, de ir a Eurovisión. Nos hemos dado cuenta de que España nunca ha mandado rock a Eurovisión. Nosotros hemos conseguido el propósito de llevar algo de rock a Eurovisión, aunque haya sido representando a otro país.
-¿Se sienten cómodos con cómo funciona la industria?
-Tiene cosas positivas y cosas negativas, como todo. No podemos quejarnos de cómo funciona. Es verdad que ahora hay que hay que sacar rápido canciones, porque si tardas equis tiempo es que estás muerto, y eso mete presión a los artistas, pero por otro lado es mucho más fácil llegar a la gente, y eso es algo muy positivo.
-¿No hay fricciones en la banda?
-De momento lo llevamos bien (ríen). Nosotros somos amigos más allá de la banda, nos vemos y quedamos muchísimo. Desde el principio hay que intentar establecer unas normas, de respeto y de funcionamiento interno, e intentar cumplirlas a rajatabla. Cuando las cosas van bien, la mayoría de las bandas se juntan y tiran hacia adelante, pero, cuando van mal, empieza a haber dinero, intereses y una serie de cosas, surgen los problemas. Por eso dejar todo claro desde el principio es lo más importante.
-Para ustedes, ¿el arte tiene límites?
-Es un tema muy complicado y muy personal. En general, debería haber ciertos límites, pero ¿dónde están y quién los pone? porque cada persona el límite está en un punto y en un tema. Quizá no haya que quitarle a nadie su libertad de expresión. Vale, úsala como quieras, pero sin faltar al respeto.