«Reivindico a los civiles que sufren en las guerras»

Lugar: Nuevo Recreo Industrial. Plaza de San Marcelo, 18.

Hora: 18.00.

Entrada: libre (hasta completar el aforo).

La historia surgió en una residencia de ancianos. María Lorenzo Valero, de 16 años y alumna de las carmelitas, se apuntó al proyecto ‘Caminando juntos’, de Cáritas, que reclutó a un centenar de adolescentes para ayudar a ancianos a sobrellevar la soledad.

Eso le permitió a Lorenzo Valero conocer a una mujer de 80 años que le contó su infancia. «Tenía pánico a ir a la escuela, hasta que llegó un nuevo maestro», cuenta. El profesor, para ganarse la confianza de sus discípulos, ponía sobre la mesa un pequeño muñeco de madera. «Enseñaba con pasión y ella iba encantada a clase, hasta que estalló la Guerra Civil. Se llevaron al maestro y no volvieron a verle».

Animada por sus padres, ambos maestros, Lorenzo Valero escribió una novela y la presentó al premio Jordi Sierra i Fabra. Su ópera prima, El muñeco del maestro, que se alzó con el galardón en la 19 edición del premio, la presenta la autora, a las 18.00 horas, acompañada por el escritor que da título al premio, en el Nuevo Recreo Industrial, donde ambos mantendrán una tertulia.

El muñeco del maestro se desarrolla meses antes de la contienda española y narra la relación entre un maestro rural y una niña de 7 años. Solo el maestro y la niña saben que el muñeco es real, tiene vida propia. El muñeco del maestro es una novela del más puro realismo mágico, en la que la fantasía sirve de evasión ante la dureza de lo cotidiano. El argumento recuerda al de la película E l maestro que prometió el mar, de Patricia Font, inspirada en la novela de Francesc Escribano. Efectivamente, María Lorenzo vio el filme, pero para entonces había acabado su relato, y se sintió fascinada por el paralelismo entre las dos historias.

La joven leonesa ya había ganado un premio en el Concurso de Cuentos Río Duero —un premio que fomenta la lectura y la escritura entre los alumnos de Primaria y Secundaria de Castilla y León— con Si mi corazón dejase de latir.

María Lorenzo tiene claro que quiere estudiar Filología, ser maestra, como el protagonista de su novela, y seguir escribiendo.

Confiesa que no tiene autores favoritos, pero sí hay dos libros que le han dejado una huella especial: El fabricante de muñecas, de Rachel María Romero, que aborda un tema tan delicado como la ocupación nazi de Polonia; y La luz que no puedes ve r, de Anthony Doerr, ganadora del Putitzer y en la que se basa la serie de Netflix protagonizada por Mark Ruffalo, ambientada en la II Guerra Mundial.

María Lorenzo, que asegura que en su colegido todos sus compañeros y profesores están emocionados por el premio, tiene ya ideas para una nueva novela, también en un escenario bélico. Admite que es «muy sensible» y que sigue los conflictos muy de cerca y ayuda a las víctimas con dinero o con su voz. «Reivindico a los civiles que sufren las consecuencias en las guerras», dice. Piensa que en cualquier historia, por mucha oscuridad que haya, siempre hay esperanza, «aunque las cosas se pongan feas». «Siempre hay otra opción», afirma.