La Diputación entregará la Medalla de Oro a Luis Mateo Díez

El escritor y académico leonés Luis Mateo Díez puso de acuerdo a todos los partidos. El pleno de la Diputación acordó ayer conceder al creador del mítico territorio de Celama la Medalla de Oro de la Provincia. Y no solo por ser el último premio Cervantes, sino por el compromiso que siempre ha mantenido el escritor lacianiego con su tierra. De momento, el equipo de Gobierno de la Corporación Provincial no ha desvelado la fecha en que hará entrega de la medalla al autor de Mis delitos como animal de compañía.

El Centro Leonés de Arte (CLA) acoge actualmente Vivir contando, una exposición sobre la vida y obra del autor de El expediente del náufrago, que reúne fotografías, manuscritos, primeras ediciones y enseres personales del escritor.

Luis Mateo ha pasado «de ser un escritor premioso, muy lento, a uno muy prolífico y muy resistente». Escribe mucho, tanto, que tiene un buen puñado de obras en cartera, entre ellas una trilogía «que no sé si publicaré». Reconoce que escribir se convirtió en «una obsesión» y que ha sido el motor de su vida. Asegura estar en su «mejor momento como escritor», una vez que su vocación se ha convertido en «una verdadera necesidad». Pero es muy consciente del paso del tiempo. «Soy un escritor crepuscular y ojalá que toda mi obra tenga la armonía de la totalidad, porque eso supone ser un escritor ambicioso», dice sabiendo que «todo está predestinado al fracaso». «El fracaso ha administrado a todos mis personajes. Todos son héroes del fracaso, con el denominador común de una vida consecuente», resume.

No aspira a la gloria ni a la eternidad. Tampoco al cielo o al infierno, «y eso que quizá estaría bien para el invierno», ironiza. «Mi verdadera aspiración es la nada, que es algo maravilloso, muy confortable», dice el laureado escritor que nunca se ha arrepentido de sus faltas y para quien «el pecado literario es el mejor de todos».