El grabado magistral de Ensor inunda Botines

Inefable: 1. adj. Que no se puede explicar con palabras. Inenarrable, inexpresable, indecible, impronunciable, sublime, divino, maravilloso, genial. Lo dice la RAE pero vale para lo que se ve en Museo Casa Botines en la exposición presentada ayer de James Ensor bajo el título de La belleza inefable. The ineffable beauty . Y no se exagera. Y si se pasea entre los grabados del genio belga, uno de los representantes más importantes de las vanguardias del siglo XX, junto a los comisarios de la exposición: Juan San Nicolás Santamaría y Carlos Varela Fernández, la lista infinita de adjetivos se podría completar con el aprendizaje de estar ante las grandes obras de un gran creador presentadas en el centro leonés gestionado por Fundos con el acierto de la delicadeza y la intención. Visita obligatoria, en definitiva, para esta belleza inefable con entradas disponibles en visita libre a 3 euros y guiada a 4 euros.

La belleza inefable forma parte del programa Ensor 2024 impulsado por el Mu.ZEE de Ostende, el KMSKA de Amberes y el Gobierno de Flandes. Expone 60 obras originales de James Ensor, incluyendo grabados, litografías, óleos y un pastel. Incluye cuatro grabados coloreados a mano por Ensor. La exposición incluye dos grabados muy escasos y difíciles de encontrar, de los cuales, solo existen diez ejemplares en el mundo. Se trata de la mayor colección de obras de James Ensor de España, reunidas en su totalidad por primera vez en esta exposición. La colección procede de la antigua colección del bibliotecario bruselense Paul van der Perre, que fue amigo personal de James Ensor y publicó varios estudios sobre sus grabados. Además de obras de Ensor, se incluyen obras de otros artistas relevantes que se ponen en diálogo con las del maestro flamenco: Francisco de Goya, Darío de Regoyos y José Gutiérrez Solana. La exposición podrá visitarse hasta el próximo 19 de enero.

James Ensor está considerado uno de los artistas más importantes e influyentes de la Europa de los siglos XIX y XX, y un verdadero precursor de las vanguardias, especialmente, del surrealismo y del expresionismo. Este año se conmemora el 75 aniversario del fallecimiento de este artista belga que cultivó una amplia producción gráfica.

En la rueda de prensa celebrada ayer, el director del Museo Casa Botines Gaudí, Raúl Fernández Sobrino, destacó la «mirada internacional» que, con esta exposición, «pretendemos reforzar desde Casa Botines para posicionar a León en el mapamundi del arte». «Nos hemos encomendado la misión de acortar los más de 1.500 kilómetros que separan León de Ostende», ciudad en la que Ensor nació y murió, además de ejecutar gran parte de la obra que recoge esta exposición temporal. Fernández Sobrinoquiso también «hacer una llamada a la comunidad belga de toda España», para que visiten Casa Botines ya que «uno de sus compatriotas y referentes en el acervo artístico de Bélgica, vive durante estos meses en León».

La exposición se completa con diez obras de Goya, ocho de Darío de Regoyos y 2 de Solana. Estos artistas están incluidos en la exposición por la relación de una u otra forma que tuvieron con Ensor. Por ello dentro del recorrido se plantean varios diálogos entre sus obras. En la muestra se incluyen dos grabados muy escasos y difíciles de encontrar, de los cuales, solo existen diez ejemplares en el mundo y cuatro grabados coloreados a mano por Ensor. La exposición es la única fuera de Bélgica que forma parte de la conmemoración oficial.