MonteLeón: 35 años de arraigo y compromiso
La Fundación MonteLeón cumple tres décadas y media con el compromiso local como referente. Ese areté de Amancio con el que reconoce a los galardonados es su fuente de arraigo y amor por León. Este cumpleaños, su impulso
Foto de familia de los asistentes a la gran cita anual de MonteLeón celebrada ayer y en la que además de los premios entregados se conmemoró su 35 aniversario. FERNANDO OTERO
Máxima aceptación
Ayer era un día de culminación, de reconocimiento, entrega y encuentro, pero la labor de la Fundación MonteLeón, con Francisco-José García Paramio en la presidencia, es de amplio y constante recorrido, con las luces largas puestas para llegar al conocimiento. Hubo premiados y autoridades, y remató el acto Carlos Pollán, presidente de las Cortes de Castilla y León. El encuentro se celebró en el salón de actos de Unicaja en Santa Nonia y sirvió para poner en cifras de oro los 35 años que cumple MonteLeón.
Los premios de los diferentes certámenes que organiza tuvieron su protagonismo, pero de igual forma se destacó lo que ya es casi hito en forma de Festival Internacional de Música de Cámara que tendrá lugar el próximo mes de diciembre en el Auditorio Ciudad de León y que MonteLeón ha impulsado.
Este II Encuentro MonteLeón fue presentado por Emma Rosa Posada, con las intervenciones del presidente de la Fundación, Francisco-José García Paramio, el alcalde del Ayuntamiento de León, José-Antonio Díez Díaz, a través de un video, y el presidente de las Cortes de Castilla y León, Carlos Pollán Fernández.
Fue un acto plural con merecidos nombres propios. Mario Blázquez Ramos, ganador del XI Premio Novela Corta Fundación MonteLeón, con su obra Las violenias; Francisco Miguel López Serrano, 59º Premio Libro de Cuentos Fundación MonteLeón, con La dulzura del apocalipsis; Manuel Moya Esobar, V Premio de Poesía Fundación MonteLeón, con su obra Libro de visitas; y Manuel Ángel Serantes Morán, ganador del I Premio del I certamen de Acuarela Fundación MonteLeón, resonaron en la gala como triunfadores en las propuestas culturales que a lo largo del año convoca MonteLeón.
En su intervención, Carlos Pollán reconoció «la labor de los mecenas» en un momento en el que corren «malos tiempos para el arte, en general», dijo. También añadió que «es la constatación de una evidencia de siglos. La evidencia de lo difícil que resulta vivir del ingenio, por talentoso que uno sea», matizó el presidente de las Cortes, quien destacó también el papel de los mecenas puesto que «es de justicia reconocer la benéfica labor que realizan, ya que sin ellos no habrían sido posibles cantidad de obras de arte para las que hoy guardamos turnos de varias horas en los museos, ni de clásicos de la literatura que año tras año agotan edición tras edición». Pollán también puso en valor el trabajo de la Fundación Monteleón y de sus 35 años de labor: «Una Fundación profundamente enraizada en nuestra tierra pero que no le impide vivir abierta al mundo», destacando el certamen literario de este año que ha batido todas las marcas de participación, con 1.200 trabajos de 35 países.
Con respecto a los premiados, el presidente de las Cortes afirmó que «la Fundación MonteLeón no premia una colección de relatos, un poema o una acuarela. Premia, además, el impulso del logro de horas robadas al sueño o la familia, encerrados en una habitación o estudio, emborronando cuartillas o desechando bocetos, componiendo tramas o versos», y concluyóido remia, en pocas palabras, el amor al arte».
El II Encuentro Monteleón se constituyó en una velada de apoyo e impulso a la cultura y el arte en todo su espectro, enmarcado en la celebración de los primeros 35 años de vida de la Fundación.