Manoel de Oliveira critica el ritmo de vida europeo en su última película

El director portugués Manoel de Oliveira ofrece una visión crítica de un determinado modo de vida europeo en El principio de la incertidumbre, filme basado en la novela Jóia de família, de Agustina Bessa-Luís que llegará a las salas comerciales españolas el próximo viernes, día 28. Isabel Ruth, Ricardo Trepa, Leonor Silveira, Leonor Baldaque y Luis Miguel Cintra son los protagonistas de una cinta que ha participado en las secciones oficiales de los pasados Festivales de Cannes y Huelva. El principio de la incertidumbre cuanta la historia de Antonio, hijo de un rico, y José, el hijo de la sirvienta, que han compartido todo durante su infancia. Con el paso de los años, Antonio se casa con Camila, de la cual José siempre ha estado enamorado, y tiene por amante a la peligrosa Vanessa, socia de José en oscuros e inconfesables negocios. «No hay un trasfondo moral en la película. Es una visión crítica de un modo de vida europeo», explicó ayer De Oliveira, un director que ha vuelto a adaptar una obra de Bessa-Luís, autora portuguesa amiga de su familia que escribe «novelas no lineales, analíticas y literarias», lo que hace más difícil la unión del lenguaje cinematográfico y literario «porque no se puede fotografiar una novela». A sus 95 años de edad, este cineasta ya está trabajando en el montaje de su nuevo filme, titulado Una película hablada, en la que han trabajado, entre otros, Leonor Silveria, John Malkovich, Irene Papas, Catherine Deneuve y Stefania Sandrelli. «Se trata de una visión sobre la civilización mediterránea, que en determinada época concentró todo el poder en la Península», explicó. «Esta película relata el viaje de una profesora de historia y su hija, que van en busca de su padre y van haciendo escala en los principales puertos del Mare Nostrum y así se adentran en las raíces de la civilización occidental», prosiguió un director que cuando filma no hace nada en sentido artístico, sino que se deja «prender por las imágenes».