Las obras del TAV descubren restos visigodos en Segovia

La Junta de Castilla y León ha dado por concluidos los estudios arqueológicos debidos al trazado del tren de alta velocidad (TAV) Madrid-Valladolid en el tramo que discurre en gran parte por Segovia que han permitido certificar la importancia de varios yacimientos, fundamentalmente de la época visigoda. El arqueólogo territorial de la Junta, Luciano Municio, explicó que salvo en el llamado «tramo cero», que discurre entre el barrio incorporado de Hontoria y la localidad segoviana de Garcillán, en el resto de los tramos del trazado por la provincia «hemos liberado ya todas las cautelas arqueológicas, y no es preciso ya llevar a cabo más intervenciones». Asimismo, señaló que en el tramo antes citado, sólo se realizará el seguimiento de los movimientos del terreno, tras la realización de una segunda prospección arqueológica. Los trabajos de seguimiento preventivo de las obras del TAV se iniciaron en 1989 cuando se manejaban varios estudios informativos sobre el trazado definitivo, y continuaron primero sobre el proyecto y después en el seguimiento de las obras de construcción de la plataforma del tren que discurren por Segovia. Municio explicó que en todos los casos se ha seguido un protocolo fijo, iniciado con prospecciones y sondeos y con posteriores excavaciones en los puntos más sensibles, lo que ha permitido salvar de la afección de las obras las zonas más comprometidas por su importancia arqueológica. Los trabajos han permitido documentar la importancia de un gran asentamiento de población entre la época visigoda o tardorromana hasta la Edad Media.