Rosa Montero publica su libro más auténtico, «La loca de la casa»
Llevaba varios años rumiándolo. Quería escribir un libro sobre el oficio de escribir, pero al final, como sucede siempre, los propósitos iniciales no se han cumplido y le ha salido un canto a la imaginación. «La experiencia me ha enseñado que la imaginación es tan importante como la vida real», afirma la periodista y escritora madrileña Rosa Montero, cuyo último libro, La loca de la casa (Alfaguara) le ha descubierto «cosas tan íntimas» sobre sí misma que lo considera su libro «más auténtico». Rosa Montero puntualiza que esto no significa que sea un relato autobiográfico. «Está lleno de mentiras, falsedades literarias se entiende, pero he reflejado mi carne y mi alma con más intensidad que en ningún otro». La loca de la casa (frase que utilizaba Santa Teresa para definir la imaginación) participa del relato, el ensayo, la memoria y la autobiografía. Hay pasajes que se cuentan varias veces, de distintos modos, como si cada uno completara (o desmintiera) al anterior. «Nunca recuerdas tu vida de forma igual, y, si un día te pones a escribirla, lo que escribes jamás coincide con lo que viviste de verdad». Rosa Montero sostiene que una de las mayores imposturas es el amor-pasión. «Este tipo de amor es el mayor invento de todos los inventos que utilizamos en la vida», subraya. «Está muy bien conocer la pasión, puesto que es uno de los grandes anhelos del ser humano, pero desgraciado aquél que sólo se queda en la pasión, porque lo único que conseguirá es repetir una y otra vez el mismo espejismo». Considera que hay que aprender a amar de otra manera. «El amor-cómplice y el amor-cotidiano son amores menos heróicos, pero a la larga pueden resultar más estimulantes».