«No me resigno a ser la viuda de Alberti, soy su mujer»

-¿Desde que se casó con Alberti su propia obra pasó a un segundo plano? -No. Yo, realmente, no tengo una obra literaria tan importante. Mis libros son antologías y estudios críticos. Aunque este año tengo mucho trabajo con la fundación, acabo de publicar tres libros: una antología titulada Con la luz primera, en Edaf; una antología para niños, Sobre el corazón un ancla, en Espasa; y dos tomos de La Generación del 27 para niños. -¿Se resigna a ser «la viuda de»? -No me resigno. Soy la mujer de Rafael y no hay resignación. Estoy contenta de haber compartido una parte de mi vida con un hombre maravilloso, la única pena es que no esté aquí. -Se acaban de publicar unas cartas inéditas de Alberti, ¿hay más textos que no hayan visto la luz? -No lo sé. Los que van surgiendo se intentan publicar. Esta corespondencia nos pareció muy interesante. Creo que no haya obra de entidad; a lo mejor, algún cuento... Rafael era muy generoso y escribió mucho. -El poeta leonés Antonio Colinas acaba de publicar una antología de Alberti, ¿es mejor que las que ha hecho usted? -Cada antólogo elige los poemas que le son más cercanos. Colinas es un gran escritor y un amigo y tiene la sensibilidad suficiente. Ha hecho una antología magnífica, en la que descubre al Alberti menos conocido. -Alberti fue nombrado huésped ilustre de La Habana, doctor honoris causa por esta univerisad y Castro le concedió en 1991 la medalla José Martí. ¿Qué habría opinado de las recientes ejecuciones de intelectuales disidentes? -No sé lo que habría opinado. Rafael estuvo apoyando en su momento una causa justa, cuando Fidel significaba para Cuba una revolución positiva respecto a otros países latinoamericanos. De todas formas, también habría que preguntar por qué Estados Unidos mata a menores o a subnormales en la silla eléctrica... -¿Se queda con el Alberti poeta, pintor o persona? -Con Rafael. No se puede hacer una obra grandísima sin ser una gran persona. Fue consecuente con sus ideas, generoso, sencillo, y eso se refeleja en la obra y en la vida. Su personalidad estaba ligada a su verso y a sus dibujos. Es una de las personas con una de las obras más autobiográficas. A través de su obra se puede conocer su vida. Es también el escritor con más registro de la poesía española -y no digo de ningún siglo, sino de la poesía española-. -¿La sombra de Alberti es alargada? -No. No tiene sombra. Alberti siempre será luz y color. -¿Cómo se lleva con otras viudas de escritores, como Marina Castaño (Cela) o María Codama (Borges)? -Siento gran respeto por ellas, por otras viudas de escritores y por viudas anónimas... Simplemente, creo que han tenido la suerte de compartir su vida con grandes escritores y, supongo que, para ellas, también, grandes hombres. -¿Las conoce personalmente? -Sí, las conozco. -Asistió el jueves a un recital en homenaje a Alberti en el Auditorio, ¿qué le pareció? -Magnífico. La soprano Elisa Belmonte y el pianista Alexis Valdés grabaron un disco sobre Rafael en 1999. Es una soprano con una gran cercanía al poeta. Rafael asistió a varias representaciones y el disco se hizo con su autorización.