El fiasco de la nueva «Matrix»

La esperada segunda parte de la saga ciberfuturista The Matrix (1999), de los hermanos Andy y Larry Wachowski, se proyectó ayer con escaso éxito de crítica en el marco de la 56 edición del Festival de Cine de Cannes. La cinta, que no compite por la Palma de Oro y que también se estrenaba ayer en EE. UU., fue considerada por los especialistas infantil y repetitiva, ya que abusa de los efectos especiales y de violentos e inverosímiles alardes de artes marciales. The Matrix Reloaded, que es menos interesante que la primera parte, pero posiblemente se convierta en un éxito popular gracias a una intensa publicidad, está protagonizada, entre otros, por Keanu Reeves, Carrie-Anne Moss, Monica Bellucci y Lambert Wilson. A lo largo de casi dos horas y media, los personajes desgranan banales comentarios con la intención de que parezcan sentencias profundas mientras atacan a sus adversarios con un limitado número de golpes que se reiteran hasta la exasperación. La acción se completa con una larga persecución en coches y motos con la consiguiente destrucción mecánica que no aporta ninguna novedad al estereotipo correspondiente. Los actores, en cambio, cumplen su trabajo a la perfección, representando personajes imperturbables que no sonríen nunca y que se mueven en una atmósfera turbia y siniestra. La otra cinta que se presentó ayer fue la suiza Ce jour-la, del chileno nacionalizado francés Raoul Ruiz, que abre la sección competitiva oficial. Se trata de una obra lenta que alterna la brillantez con la confusión, y que su director califica como fábula maravillosa, política y policíaca a la vez. La cinta de Ruiz, en cambio, está planteada desde la inteligencia, el humor y la crítica social. La tesis central del director es que la inocencia y la locura son los instrumentos de la manipulación. Las tres partes que la componen -el cuento maravilloso, la fábula política y la narración policíaca-, sin embargo, se mezclan restando, por momentos, claridad al conjunto. Ruiz nació en Puerto Montt en 1941 y entre su abundante filmografía -unas noventa películas- figuran La expropiación, Les destins de Manoel y Richard III. Ce jour-la está magníficamente protagonizada por Michel Piccoli y Elsa Zylberstein.