Libros de piedra

JAVIER CABRERA Darquea fue un doctor peruano que agotó su energía en demostrar que los varios miles de piedras grabadas que fue recogiendo a lo largo de su vida en varios yacimientos del desierto, proceden de una civilización que se remonta a 2.500 años. Su conjunto conforma una Biblioteca Lítica que lleva su nombre. El escritor J.J. Benítez estrenó Planeta encantado (La Primera) afrontando ese tema junto a las más de 200 figuras kilométricas de Nazca, también en Perú. Misterios sin resolver, permanentes ventanas abiertas a la polémica desde hace años, y que constituyen una sustanciosa fuente para productos audiovisuales de este estilo. Uno recuerda al profesor Del Oso y sus espacios dedicados a toda clase de misterios, en donde la ciencia se daba de bruces con el cuento chino y la teoría más estrafalaria. Entretenían, sin duda. Mirando para las piedras reunidas por el doctor Cabrera y sus enfáticos argumentos, resulta imposible no estar a su lado. Ciertamente son asombrosas. Benítez se fue a Perú y logró que lo llevaran a uno de esos yacimientos. Enero de 2002. Se hizo con cinco y certificó que no habían sido colocadas allí por el timador de turno. Incluso logró que cinco laboratorios universitarios certificasen su autenticidad. En fin, misterios al margen, en Planeta encantado hay tele con clase.