Una intensa vida dedicada a la política y a la actividad literaria

? A los 18 años era un joven contestatario con arraigadas convicciones políticas. En 1961 ingresó en el Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) y al año siguiente fue encarcelado tras un consejo de guerra. El motivo: ponerse de parte de los huelguistas asturianos. La sentencia: tres años en la trena. «Nos encarcelaron a mí y a mi mujer; a ella le cayeron seis meses y a mí tres años; en la manifestación que organizamos se me ocurrió cantar Asturias, patria querida y eso debió enfurecer a las autoridades franquistas». Poco tiempo después se integra en la revista Triunfo, la publicación más progre del momento y donde dará a conocer su cáustico y despiadado estilo. Los artículos de esta etapa serían recopilados en sendos libros: Crónica sentimental de España y Manifiesto subnormal . Como novelista se estrenó en 1972 con Yo mate a Kennedy , donde aparece por primera vez el personaje de Carvalho. La novela pasó con más pena que gloria. Dos años después escribe Tatuaje, también protagonizada por el cínico y sibarita Pepe Carvalho. Aparte la serie sobre el excéntrico detective y las obras ya citadas, merecen recordarse Pasionaria y los siete enanitos (sobre la figura de Dolores Ibarurri), Marcos, el señor de los espejos (sobre el líder de la guerrilla zapatista), Y Dios entró en La Habana o Erec y Enice , una novela basada en la leyenda artúrica. Varias de sus obras han sido llevadas al cine. Actualmente está en cartel El misterio Galíndez.