La leonesa Agustina Otero muestra su obra «Crepitar» en San Sebastián
Nacida en el pueblo leonés de San Adrián del Valle y autora, junto al artista vasco Leopoldo Ferran, de una obra inquisitiva y densa, que suele plantear al espectador preguntas de gran calado, Agustina Otero expone hasta finales del presente mes en San Sebastián una serie de instalaciones que llevan el título genérico de Crepitar . El espacio elegido para mostrar estas creaciones, elaboradas también junto a Leopoldo Ferran, es la sala Koldo Mitxelena de la capital guipuzcoana. Para ambos artistas, las obras expuestas en este centro son «como las brasas, que a la mañana son memoria del fuego que han sido y germen de otro posible fuego»; de ahí procede el título de la muestra. Así, la idea central a la que alude Crepitar no es otra que la investigación acerca de un supuesto proto-momento o proto-lugar en el que la forma tiene posibilidades infinitas, y que se haya en un estado de latencia. La exposición reúne por tanto una serie de esculturas, vídeos e instalaciones, lenguajes todos ellos diferentes pero que responden al concepto de «contenedor» de lo posible. En ella pueden encontrarse esferas, sirenas, un banco de yeso, un paseante con capa, unas cascadas de cera y una gran masa de blanda arcilla. Como afirma el filósofo Marcos Zapiáin, redactor del catálogo de la exposición, «da la impresión de que en estas seis habitaciones la vida, la pasión, parece haberse apagado ya, o no haber surgido aún; se encuentra en estado de potencia, como las brasas que crepitan suavemente tras haber ardido el fuego, y que permitirán que el fuego vuelva a arder al día siguiente». Hilos de cera que esperan el sello de una idea, una caja de yeso de donde parece querer surgir algo imposible de ser encerrado, una figura que protege en su capa una vacilante llamita... sugerencias acerca de la materia prima previa al trabajo del artista, todo un un canto a la ilimitadas posibilidades de la creación.